A fin de matizar la gravedad de una crisis económica, la cuarentena obligatoria se extiende a la vez que se autoriza a más sectores a retomar su actividad. Al comienzo, solo podían circular aquellos vinculados a la salud o alimentación de la población; hoy en día, sectores como la construcción pueden volver a avanzar con sus proyectos.
La medida afecta directamente al sector energético porque conduce a continuar con los proyectos en marcha de energías renovables, por ejemplo. Al respecto, está previsto que este año comiencen a funcionar catorce nuevos parques eólicos aportando 1.044,9 MW a la red. Los plazos de finalización seguramente se extenderán, en tanto que todo se detuvo el 20 de marzo pasado.
La empresa con más obras a cargo es Goldwind, fabricante de aerogeneradores de origen chino, cuyo proyecto Miramar (Miramar, Buenos Aires) de 97,7 MW es el más avanzado. Le siguen los emprendimientos Loma Blanca I y III (Trelew, Chubut), cada uno de 50 MW, y Loma Blanca VI (Puerto Madryn, Chubut), de 100 MW.
Genneia, operadora de siete parques eólicos en Argentina por 600 MW, junto a PAE, retoman la construcción de las centrales eólicas Chubut Norte III, de 57 MW, y Chubut Norte IV, de 83 MW, ambos en Puerto Madryn.
PCR avanzará con los parques eólicos de 100 MW cada uno, San Jorge y El Mataco, ambos en Tornquist (Buenos Aires). En rigor, El Mataco ya entró en operaciones en marzo pasado y San Jorge lo hará dentro de unos meses. Los proyectos de Total Eren que retoman la actividad son Vientos Los Hércules (Las Heras, Santa Cruz), de 97,2 MW; y Malaspina I (Malaspina, Chubut), de 50 MW.
De parte de Envision, avanza Vientos del Secano (Buratovich, Buenos Aires), de 50 MW. De Grenergy, Kosten (Pampa del Castillo, Chubut), de 24 MW. Por último, se destaca el parque eólico de YPF Luz y Equinor, Cañada León (Cañado Seco, Santa Cruz), de 99 MW. No menos importante, La Genoveva (Bahía Blanca, Buenos Aires), de 86,6 MW, proyecto de Central Puerto.