El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundió este miércoles los datos relevados correspondientes al mes de abril, y que dan como resultado que el costo de los productos que integran la Canasta Básica Alimentaria (CBA) subió 3,1% el mes pasado, lo que determinó que una familia conformada por dos adultos y dos hijos menores de edad necesitara ingresos por $ 17.895,63 para no caer en la indigencia.
En tanto, el costo de la Canasta Básica Total (CBT) avanzó 1,4 % durante abril, con lo cual una familia, integrada por dos adultos y dos niños de seis y ocho años, necesitó percibir ingresos por $ 45.593,98 para no caer debajo de la línea de la pobreza.
Según el informe de la dependencia oficial, la Canasta Alimentaria, que mide la evolución de los precios de productos alimenticios necesarios para la subsistencia, y que marca el umbral por debajo del cual se cae en la línea de indigencia, acumuló una suba del 14,8 % en el primer cuatrimestre.
En tanto, la Canasta Total, que mide la necesidad de alimentos y bebidas, indumentaria y el pago de servicios, se incrementó 9,3 % entre enero y abril, debido a que las tarifas de los servicios públicos se encuentran congeladas desde principios de año.
La última medición del Indec, dada a conocer en marzo sobre datos del segundo semestre del 2019, registró que el 35,5% de los habitantes estaban por debajo de la línea de la pobreza, lo que representó un aumento de tres puntos y medio frente al 32% registrado de finales del 2018.
En tanto, el nivel de indigencia medido entre julio y diciembre del año pasado fue de 8%, con un incremento de 1,3 puntos en relación al 6,7% del segundo semestre de 2018.
De esta manera, sobre una población de 47 millones de habitantes, alrededor de 16,4 millones de personas son pobres; es decir: no tuvieron los ingresos suficientes para adquirir la alimentación, servicios básicos e indumentaria, que se requieren para no ubicarse por debajo de la línea de pobreza.
La actividad económica cayó 11,5% en marzo, mes en que comenzó el aislamiento.
El nivel de actividad económica retrocedió 11,5% en marzo en términos interanuales, mes en el que comenzaron las medidas de aislamiento para morigerar el avance del coronavirus, publicó este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Censos en otro informe.
Además, en marzo la actividad económica cayó 9,5% frente a febrero pasado, último mes en que se desarrollaron con normalidad las labores. De esta forma, en los tres primeros meses del año el nivel de actividad acumuló un retroceso de 5,4%.
Para encontrar una caída interanual similar a la del 11,5% de marzo hay que remontarse a los meses de abril y mayo del 2009, cuando por la crisis con las entidades agropecuarias por la Resolución 125 y las restricciones puestas en marcha por la Gripe A, se anotaron bajas del 11,9% y 13,7%, respectivamente.
En marzo de este año, solo la distribución de agua, gas y electricidad cerró con un incremento interanual, del 6,7%, mientras que todos los demás rubros presentaron bajas.