El trabajo de poda y desmalezamiento que realiza un equipo de la Municipalidad en torno de la línea de 33 KV mostró esta semana buena parte de sus resultados, al no producirse cortes de electricidad en El Hoyo pese a que la Comarca toda sufrió fuertes tormentas de viento y lluvia a lo largo de varios días.
El trabajo se realiza desde febrero, con una breve interrupción al comienzo de la pandemia, y consiste en despejar la franja de 22 kilómetros por entre 8 y 10 metros de ancho alrededor del cableado de 33 mil voltios entre Coihues y Las Golondrinas.
Cada día, una cuadrilla de seis trabajadores más un jefe desmaleza y poda una franja del terreno, generando una calle limpia por debajo del cableado, y periódicamente se realiza un corte programado para voltear árboles grandes cuyos ramas más altas se enlazan con los cables y, hasta ahora, producían los cortes. Y, en verano, desataban algunos incendios.
Con esta tarea fundamental, que ya ingresó en su etapa final, se habrá dado fin a por lo menos entre el 85 y 90% de los incesantes cortes de electricidad que sufrían las vecinas y vecinos de El Hoyo, y que llegaban a producir estragos en los electrodomésticos.