En Chubut, los productores de lana reclaman la prórroga de la ley ovina y una actualización de los fondos. En los últimos meses se ha observado el “cierre de uno a dos campos por mes”, afirmó Ricardo Irianni, presidente de la Sociedad Rural del Valle Chubut. La Ley ovina para los productores que viven total o parcialmente de la actividad ha sido una de las herramientas más importantes para el sector. En los campos de Chubut, sin la actividad ovina, se cierran las tranqueras.
“La lana tiene una retención alta para lo golpeada que está la actividad”, sostuvo Irianni en diálogo con AzM Radio, al advertir que resulta llamativo que, “no se hable de un programa de fondo, global, visible. Eso indica que los que gobiernan el país no tienen intención de comprender la producción”.
La característica de la Ley ovina es que se trata de créditos o aportes reintegrables que pueden tener hasta dos años gracia y hasta cinco años para su devolución y con un interés mínimo.
Los productores han accedido a esta herramienta desde 2001 y los gobiernos provinciales con los montos recuperador de los créditos, generan nuevos créditos. Sin embargo, si no hay una prórroga de la ley, más modificaciones, el sector ovino vería afectada la producción.
Según indicó Irianni, “hay 12 millones de ovejas en la provincia y por cada $50 que no recibe el productor, hay un impacto de $3 mil millones en la actividad lanera».