En su recorrido por la región, el segundo destino para la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, fue Cipolletti. La funcionaria se reunió con la gobernadora Arabela Carreras y con el ministro de Salud provincial, Fabián Zgaib para interiorizarse sobre la crisis sanitaria que atraviesa la ciudad, y la región, con el impacto que tiene la segunda ola de covid.
Luego se reunió con los referentes de los principales centros de salud de la provincia para coordinar estrategias en conjunto, con el propósito de amortiguar el crecimiento sostenido de casos que pone en jaque al sistema sanitario.
Sobre la segunda ola de coronavirus, la ministra destacó que además de tener un mayor impacto en jóvenes, las nuevas cepas que están ingresando al país, y que algunas ya circulan por la región tienen una transmisibilidad más alta y una letalidad más elevada que la cepa que genérica que circula desde el año pasado. También contó que la virulencia de las nuevas variantes afecta con más fuerza a jóvenes adultos.
En ese sentido, Vizzotti remarcó la importancia de bajar la ciruclación como principal medida para frenar el avance del virus y se refirió, como lo hizo ayer en Neuquén, a la crisis que atraviesa el sector sanitario.
«Esta segunda ola nos encuentra en una situación totalmente diferente a la primera, con un crecimiento exponencial del número de casos, muy grande en muy poco tiempo y sobre todo en muchas áreas de nuestro país. Lo cual pone en tensión el sistema de salud a pesar de su fortalecimiento, de todo lo que se hizo el año pasado para aumentar un 50 % la capacidad de camas de terapia intensiva», indicó la funcionaria.
Detalló, además, que la estrategia para frenar los contagios serán «localizadas e intermitentes». Es decir que habrá una evaluación constante de la situación epidemiológica de cada región para aplicar medidas. «El sistema sanitario está más fortalecido pero está en tensión por esta situación que es este aumento exponencial con las nuevas variantes que tiene una transmisibilidad más alta y una letalidad mayor».
Señaló que el «límite» en esta crisis sanitaria es el recurso humano. «Tienen su vacuna, tienen más experiencia pero están agotados, la forma de colaborar es disminuir la circulación», manifestó.
En ese sentido, la gobernadora Arabela Carreras señaló que se está trabajando sobre un paquete de medidas pero reparó en la necesidad de seguir sosteniendo al sector productivo que ya viene golpeada por el largo período de restricciones que se vivió el año pasado.
Precisó que se está analizando si se suspenden las clases presenciales en la provincia, aunque señaló que no es un lugar de contagio, sino que el principal escollo es el transporte público.
«Estamos mirando el día a día. Sobre las clases, lo que vimos por los datos que tenemos, es que los contagios no se producen dentro de las aulas, que es donde los protocolos están funcionando. Pero hay un momento, que por el crecimiento de los casos debemos detener el movimiento de las personas. En ese caso podría ser que se detuvieran las clases para bajar la circulación», indicó.