El 31 de agosto de 1999, el vuelo 3142 no pudo despegar y se estrelló contra un auto, máquinas viales, un terraplén y una planta reguladora de gas que provocó la muerte de 65 personas y otras 34 resultaron heridas. Qué pasó después.
Hace 22 años atrás, un 31 de agosto de 1999, la ciudad de Córdoba fue escenario del accidente del vuelo 3142 de Líneas Aéreas Privadas Argentinas (LAPA). A bordo de la aeronave se trasladaban 103 personas, de las cuales 65 fallecieron y 34 resultaron heridas.
Sobre las personas del avión, 98 eran pasajeros y 5 miembros de la tripulación. Es considerado uno de los cuatro accidentes más graves en la historia de la aviación argentina.
La aeronave que sufrió el siniestro fue un Boeing 737-204C, que debía trasladar en un vuelo regular, a dichos pasajeros desde el Aeroparque Jorge Newbery hasta la ciudad de Córdoba.
Los motivos detectados del siniestro fueron unas fallas en los motores y la ausencia de funcionamiento de los flaps de las alas, que nunca permitieron tomar vuelo a la aeronave, lo cual hizo que la misma siguiera su carrera por tierra.
En ese trayecto involuntario, el avión atravesó la Avenida Costanera Norte, chocando con un auto, máquinas viales, un terraplén y una planta reguladora de gas. El choque con esta última provocó que, por el escape del combustible y el gas, se genere un incendio que causó la muerte de quienes habían sobrevivido al accidente.
Si bien Gustavo Weigel, el comandante, y Luis Etcheverry, el copiloto fallecieron en el acto, varios directivos de LAPA y funcionarios de la Fuerza Aérea responsables de los controles fueron acusados penalmente y llevados a juicio en el año 2005.
Finalmente, todos fueron absueltos, solamente el gerente de Operaciones, Valerio Francisco Diehl, y el jefe de Línea de Boeing 737-200, Gabriel María Borsani, fueron condenados a tres años de prisión en el año 2010, pero sus sentencias fueron anuladas por la demora de los jueces, la cual había excedido los plazos legales.
Tras el accidente, tanto la reputación LAPA como sus ingresos decayeron. Así fue como, cuatro años después de la tragedia, el 20 de abril de 2003, la empresa presentó quiebra y cesó su actividad.
En la actualidad, es un caso que a nivel mundial es mencionado para ejemplificar la impunidad judicial. Ninguno de los acusados cumplió una condena.
Según informó Filonews, el accidente apareció en películas, series y documentales sobre aviación tales como «Whisky Romeo Zulú».