Cuatro personas murieron, al menos 20 resultaron heridas y 720.000 sufrieron cortes de energía eléctrica tras el paso de un ciclón extratropical que provocó destrozos, deslizamientos, lluvias e inundaciones en el sur y el sudeste de Brasil, informaron las autoridades.
Según detalló la Defensa Civil, el ciclón afectó principalmente a los estados meridionales de Río Grande del Sur, Santa Catarina y Paraná, pero también dejó impactos con las ráfagas de viento cercanas a los 100 kilómetros por hora en el estado de San Pablo (sureste), el más poblado de Brasil.
El ciclón generó atrasos y cierres en las terminales portuarias del sur de Brasil y en aeropuertos, además del bloqueo de más de 10 carreteras por causa de caída de árboles y crecida de los ríos.
Según la Policía, cuatro personas fallecieron, una en Río Grande (estado de Río Grande del Sur), una en Brusque (estado de Santa Catarina) y otras dos en el estado de San Pablo.
La víctima mortal de la playa de Itanhaém (San Pablo) sufrió un cortocircuito al caer el tendido eléctrico a causa del viento, y las otros tres fueron víctimas de derrumbes provocados por el viento.
El Instituto Nacional de Meteorología declaró «alerta roja» a la región sur de Brasil por los eventos climáticos del ciclón extratropical.
Es el tercer ciclón extratropical en menos de un mes, precisó un cable de la agencia de noticias Xinhua.