En un mitin en Waukesha, Wisconsin, el ex presidente de Estados Unidos y precandidato republicano, Donald Trump, elogió el «gran trabajo» realizado por la Policía de Nueva York al desalojar a los manifestantes propalestinos que habían ocupado la Universidad de Columbia. Trump afirmó que Nueva York estaba siendo atacada por estudiantes que protestaban contra la política estadounidense de apoyo a Israel durante el conflicto en Gaza.
Durante su discurso, Trump comentó que la policía intervino y en tan solo dos horas logró poner fin a la situación. Según sus palabras, fue una escena hermosa y lo mejor que había presenciado en Nueva York. También elogió la forma en que la policía enfrentó a los manifestantes, calificando su actuación como increíble.
El ex presidente criticó duramente a la presidenta de la Universidad de Columbia, Nemat Shafik, a quien acusó de ser débil y de haber esperado demasiado tiempo para actuar. Según Trump, la reputación de la universidad se vio gravemente dañada debido a su falta de acción. Sin embargo, elogió el trabajo realizado por la policía al ingresar al edificio ocupado por los estudiantes.
El edificio en cuestión, Hamilton Hall, fue tomado por los manifestantes propalestinos y posteriormente desalojado por las autoridades. El operativo de desalojo resultó en la detención de 282 manifestantes, según informó el alcalde de Nueva York, Eric Adams. Este emblemático edificio de la Universidad de Columbia ya había sido ocupado en 1968 durante las protestas contra la guerra de Vietnam.
Nemat Shafik emitió una carta abierta a la comunidad universitaria después del desalojo, donde señaló que las protestas habían llevado a la universidad al borde del abismo. Las demandas de desinversión en compañías vinculadas al conflicto en Gaza han movilizado a los estudiantes en todo el país, provocando una escalada de protestas.
En la madrugada de ese mismo día, la Policía de Los Ángeles también intervino en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) para detener los enfrentamientos violentos entre grupos de manifestantes proisraelíes y los que pedían el fin de la guerra en Gaza. Como resultado de los disturbios, la UCLA canceló todas sus clases.
El mitin de Trump en Wisconsin formó parte de su campaña electoral en dos estados clave, incluyendo Michigan. Trump espera ganar estos estados en las próximas elecciones presidenciales para desbancar al actual presidente demócrata, Joe Biden. La región del Cinturón del Óxido, donde se encuentran estos estados, es crucial debido a su importancia industrial.
Según las encuestas más recientes, Trump lidera la intención de voto a nivel nacional, pero el sistema de Colegio Electoral hace que los estados indecisos sean determinantes para el resultado final. Durante su campaña, Trump se atribuyó el mérito de la restricción del aborto en Florida y defendió que cada estado debe tener su propia legislación al respecto.