Simón Álvarez, un niño oriundo de Rawson, salió a la cancha con la Selección Argentina en su encuentro con Chile en el Más Monumental.
El mismo acompañó Nicolás Otamendi por la séptima fecha de las Eliminatorias Sudamericanas.
Una ONG, que se dedica a cumplir los sueños de los niños que padecen esta enfermedad, eligió a Simón; quien con toda la felicidad del mundo pudo tomar la mano de uno de sus ídolos y desfilar hasta el verde césped, en el reencuentro de la Scaloneta con el público argentino.