Este sábado, el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda de Turquía, declaró un alto al fuego completo. Cumpliendo con el llamado de su líder Abdullah Öcalan para poner fin a más de cuatro décadas de conflicto armado.
Öcalan, que ha estado encarcelado en Turquía desde 1999, hizo pública esta propuesta el jueves pasado. Sugiriendo el desarme de la organización y su integración a la sociedad turca. La guerrilla aceptó el llamado en un comunicado oficial difundido por la agencia ANF, habitual portavoz del PKK. Publicó R3cp
El mensaje del PKK establece que el alto al fuego comenzará de inmediato y que no se llevarán a cabo acciones armadas. Salvo en caso de ataque. «Para abrir el camino al llamado del líder Apo (Öcalan) por la paz y la sociedad democrática, proclamamos un alto al fuego.
Vigente a partir de hoy», reza el comunicado. Además, el PKK destacó su disposición a avanzar con el desarme bajo la supervisión de Öcalan. Quuen tiene la última palabra sobre cómo se llevará a cabo este proceso.
Condiciones para el desarme
El comunicado también menciona que el desarme solo podrá concretarse con la creación de un «ambiente de seguridad adecuado». Un requisito que el PKK condiciona a la «libertad física» de Öcalan. La organización considera que el líder debe poder vivir y trabajar sin restricciones. Lo que implica la posibilidad de establecer relaciones libres con sus allegados y seguidores, tal y como ha solicitado en su mensaje.
La liberación de Öcalan se presenta como una condición esencial para que el proceso de desarme y paz se lleve a cabo de manera efectiva.
El fin de 40 años de conflicto
Fundado en 1978, el PKK ha dirigido una insurgencia contra el gobierno turco desde 1984, buscando la creación de un Estado kurdo independiente. Este conflicto, que ha dejado más de 40.000 muertos, ha marcado a toda una generación de kurdos y turcos.
El anuncio de alto al fuego llega tras cuatro meses de negociaciones entre las autoridades turcas y el partido prokurdo DEM. Durante los cuales se discutió la posibilidad de alcanzar una solución pacífica al conflicto.
El presidente turco Recep Tayyip Erdogan celebró el anuncio del PKK como una «oportunidad histórica» para avanzar hacia la paz. Durante su discurso, destacó que este proceso podría significar el fin del «muro del terror» y prometió seguir de cerca los avances en las negociaciones.
La situación sigue siendo incierta, pero el alto al fuego representa un paso importante hacia el cierre de un capítulo de violencia y sufrimiento en la historia reciente de Turquía.