Este sábado, Yamandú Orsi asumirá oficialmente como presidente de Uruguay, marcando el regreso del Frente Amplio al poder. Durante la ceremonia, que se celebrará en Montevideo.
El mandatario de 57 años enfrentará desafíos tanto internos como externos. Destacándose el estancamiento económico y las tensiones dentro de su coalición política. Publicó R3cp
Orsi, un pragmático progresista y ex intendente de Canelones, ha sido históricamente cercano al ex presidente José Mujica. Y su mandato llega con un equipo económico claramente ortodoxo.
Entre las designaciones claves se encuentra Gabriel Oddone, un economista pro mercado, como ministro de Economía, y Guillermo Tolosa. Quien dirigirá el Banco Central de Uruguay (BCU) tras una larga carrera en el Fondo Monetario Internacional. Estas decisiones envían señales de estabilidad económica a los mercados, en un momento donde la inflación sigue siendo un desafío.
Uno de los principales problemas económicos a abordar será la generación de empleo, dado que en los últimos años. Uruguay ha experimentado una caída significativa en la cantidad de puestos de trabajo disponibles. En paralelo, el país atraviesa una crisis en la industria ganadera, la cual está afectando a miles de ahorristas uruguayos.
Por otro lado, la política internacional de Orsi también ha generado expectativas, especialmente con respecto a la relación con Venezuela. A raíz de la reciente crisis diplomática con el régimen de Nicolás Maduro.
Si bien Yamandú Orsi no invitó a Maduro a la ceremonia, ha buscado acercamientos con otros líderes de izquierda de la región. Como el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y el mandatario de Chile, Gabriel Boric.
La gobernabilidad también se perfila como un desafío importante para el presidente. Ya que Orsi no tiene control total sobre ambas cámaras del Congreso. En el Senado, el Frente Amplio tiene mayoría, pero en la Cámara de Diputados enfrentará una oposición activa.
Además de la economía, las tensiones internas del Frente Amplio, que aún arrastra diferencias entre sus facciones. Pondrán a prueba la capacidad de Yamandú Orsi para mantener la unidad dentro de su coalición durante su mandato.
En el contexto regional, Uruguay se enfrenta a la presión externa de Estados Unidos y otros países. Que exigen medidas más estrictas contra el tráfico de drogas y la producción de fentanilo.