Elon Musk. Los roces entre el magnate Elon Musk, jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental de los Estados Unidos (DOGE, por sus siglas en inglés), y el secretario del Tesoro, Scott Bessent, derivaron en una airada «pelea a gritos» en el ala oeste de la Casa Blanca, en el desenlace de un altercado que comenzó dentro del Despacho Oval y en presencia del presidente, Donald Trump.
Así lo informaron a Axios dos testigos y tres fuentes informadas sobre la acalorada discusión que también habrían presenciado otros funcionarios estadounidenses. El hecho ocurrió el jueves de la semana pasada pero se conoció en las últimas horas, cuando cobró repercusión en los medios internacionales, Actualidad RT entre otros.
Fue tras una reunión en Washington en la que surgió un desacuerdo entre Musk y Bessent sobre quién dirigiría el Servicio de Impuestos Internos de los Estados Unidos (IRS, por sus siglas en inglés).
«Eran dos multimillonarios de mediana edad que creían que estaban la WWE (en referencia a los espectáculos de peleas de lucha libre en los Estados Unidos) pero en realidad era el
vestíbulo del ala oeste», definió un testigo.
Aunque la pelea no terminó con daños físicos, ambos estuvieron a punto de golpearse, si no fuera porque un asistente se interpuso para separarlos, aclaró.
La pelea además llegó a oídos de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, quien visitaba a Trump ese día en la Casa Blanca.
El día de la disputa Bessent confrontó a Musk y, según testigos, lo criticó por prometer demasiado y no cumplir con los recortes presupuestarios que tendría que ejecutar DOGE.
Ante esto, el magnate y propietario de Tesla, entre otras compañías tecnológicas, señaló al jefe del Tesoro de ser un «agente de (George) Soros» y lo acusó de haber dirigido «un fondo
de cobertura fallido».
La situación escaló rápidamente hasta el punto que Bessent se enfureció y gritó: “¡A la mierda!”
Mientras que Musk respondió: «Dilo más fuerte».
A partir de ese momento, se generó todo el alboroto, siguió la crónica.
Al día siguiente, la pelea por el IRS terminó a favor de la postura de Bessent, luego de que se conociera que sería Faulkender el encargado de esa instancia y no Shapley.
«Scott ganó esa ronda», señaló una fuente, quien agregó que «no querría a alguien como Musk de enemigo».
Según Axios, el último conflicto entre Musk y Bessent empezó a gestarse el pasado 16 de abril, cuando Trump nombró a Gary Shapley —elegido por Musk— como comisionado interino del IRS; mientras que Bessent quería que en ese puesto colocaran al subsecretario del Tesoro, Michael Faulkender.