Las importaciones y la caída en el consumo impactan negativamente en el desarrollo de la actividad.
La semana pasada se realizó una reunión con autoridades del Ministerio de Producción de la provincia de Chubut en la que distintos productores plantearon las necesidades que está atravesando el sector, solicitando acompañamiento del Estado provincial.
Desde la Sociedad de Productores de Lago Puelo, aseguraron que existe un estado de crisis en la producción de fruta fina, generada por las medidas macroeconómicas tomadas por el gobierno nacional, como el empuje a las importaciones y la baja del consumo a los fines de disminuir la inflación.
Ante esto, se solicitó una reunión con autoridades provinciales que fue pospuesta desde el 20 de julio pasado hasta el martes 30 de agosto, fecha en la que finalmente, el subsecretario de Producción y tres directores de distintas áreas de la cartera, se acercaron a Lago Puelo para mantener un diálogo directo con los productores. Además, se presentaron gente del INTA y cooperativas locales.
Paula Acosta, integrante de la Sociedad de Productores, aseguró que hay crisis de productores y que “se va a ir agravando en el tiempo en la medida en que siga entrando fruta de Chile”.
Desde la provincia aseguraron que no pueden modificar una política macroeconómica tomada por el gobierno nacional ya que no tiene injerencia para manejar una cuestión que es materia de decisión nacional. En ese punto, según Acosta, claramente pueden decir que no hay crisis porque no pueden regular ni controlar el acceso de fruta.
Finalizado el encuentro, los Directores de la cartera de producción estuvieron reuniéndose con productores e interiorizándose de lo que ocurre, llevándose una impresión de la situación de cada uno.
Desde el Ministerio de Producción se han hecho cargo de alrededor de 68 toneladas de fruta fina producida en la zona cordillerana chubutense, que se han vendido a un valor que oscila entre los $60 y $70 el kilo, habiendo el precio sufrido un incremento de costos en detrimento de la calidad.
Asimismo, los funcionarios ofrecieron todas las medidas paliativas posibles para disminuir la situación crítica que aflige a los productores.
Por otro lado, Acosta sostuvo que el precio de la fruta fina para la próxima temporada, depende de lo que se analice en el Taller de Costos que realiza el INTA junto con los productores, pero dejó en claro que la inflación se deberá trasladar al precio.
“Irá aumentado con el incremento del cosechador, insumos, luz. Se debe ir ajustando a los precios que hay de costos”, señaló.
“Hay que buscar nuevos mercados, pero a veces no hay logística”, dijo Acosta.
Por último, en el encuentro son los funcionarios provinciales, se analizó la posibilidad de colocar los productos en el mercado concentrador de Trelew. Esto ha sido un pedido que se le hizo a provincia para conceder a los productores una isla o espacio donde poder llegar con la mercadería, acompañado por la determinación de un un valor diferencial en cuanto al consumo de electricidad con todo lo que sea producción ya que actualmente los productores pagan luz como si se tratara de consumo residencial cuando esto no es así.
Desde provincia se comprometieron a realizar las gestiones que puedan para modificar la tarifa, aunque sea, en los períodos de cosecha y trabajo intensivo de diciembre a marzo.
Diario Bolsonés