Esquel se suma a la campaña «Buzones por la vida» que se lleva a cabo en distintos puntos del país para que los vecinos puedan acercar de manera anónima denuncias a las iglesias.
El primer «Buzón por la Vida» fue instalado en la Parroquia Sagrada Familia. Habrá urnas en otras iglesias católicas de Esquel, con la intención de que vecinos -de manera anónima- dejen denuncias sobre venta de droga o trata de personas, que luego serán giradas a la Justicia para su investigación.
Es una prueba piloto que se realiza en conjunto con la Justicia federal en un intento por desbaratar redes de trata de personas y de venta de estupefacientes. La iniciativa surgió a partir de las denuncias por trata de personas recibidas por integrantes de Cáritas de la Prelatura Esquel, pero a partir de la demanda del Juzgado federal se decidió incluir la problemática del narcotráfico.
La persona, sin necesidad de identificarse, puede aportar datos por escrito del ilícito que se estaría cometiendo. Semanalmente funcionarios judiciales abrirán la urna y retirarán las denuncias.
El padre Rodolfo Costa Heredia confirmó que el 25 de noviembre se instaló este «Buzón de la vida» en la Parroquia Sagrada Familia. «A veces la gente ve cosas pero no tiene datos suficientes, entonces se puede decir si tal persona vende drogas o trafica con personas, una pequeña descripción del hecho y horarios en que ve la actividad» indicó a Diario El Chubut.
El Patagónico