En este sentido, Danniaux sostuvo que «estas actividades de verano surgieron por la necesidad de niños muy pequeños de no contar con espacios tras el ciclo de jardines maternales. En este sentido, planteamos actividades diferentes a las que se realizan durante todo el año».
«Desde el equipo técnico se armaron propuestas recreativas, artísticas, de juegos, exploración e imitación. Esto se refuerza porque son actividades de verano donde contenemos a niños, con desayuno y almuerzo también», expresó.
Asimismo, la referente de jardines maternales destacó la realización de dichas propuestas «porque a través del juego los niños pueden ir aprendiendo las normas de convivencia, la relación con adultos, resaltando su máxima expresión creadora. Perseguimos una intencionalidad educativa pero en el verano somos flexibles, porque el clima nos permite jugar al aire libre y con otros elementos como el agua».