Al menos cuatro iraquíes murieron y 16 resultaron heridos en el primer ataque suicida ejecutado en Bagdad, Irak, en el mes sagrado de Ramadán.
El ataque ocurrió cuando un suicida hizo detonar un cinturón de explosivos que transportaba, cuando fue detenido por las fuerzas de seguridad en el momento que trataba de entrar a un parque lleno de personas ubicado en la zona de Al Shoala, en el noreste de Bagdad, informaron a EFE fuentes policiales iraquíes.
La policía detalló que la explosión acabó con la vida de cuatro personas, entre ellos un oficial de policía, y causó daños materiales a un restaurante y una cafetería, así como a casas cercanas al parque.
Hasta el momento, ningún grupo extremista asumió la responsabilidad por el atentado en Irak.
Sin embargo, la zona de Al Shoala es conocida porque la gran mayoría de los residentes, de mayoría chiíta, son seguidores del clérigo Muqtada al Sadr, que ganó en las elecciones celebradas el 12 de mayo.
El parque, situado en una zona popular de la capital, estaba abarrotado por la noche, ya que en el mes de Ramadán los musulmanes suelen agruparse en esos recintos para romper el ayuno, obligatorio para los fieles.