Franco Silvestri tenía todo preparado. En pocos días tenía previsto rendir la materia «internacional privado». Era el último final y se recibía de abogado. Había comenzado a hacer todos los arreglos para festejarlo. Sebastián Berra seguía el mismo camino. Aunque aún le faltaba un poco más de tiempo, también iba camino a recibirse. Y figuraba en el «cuadro de honor» por sus altas calificaciones. Además de la pasión por Boca, ambos compartían ese otro otro sueño que también truncó la tragedia del sábado por la mañana.
Silvestri y Berra son dos de los hinchas de Boca que murieron en un choque en la ciudad de Lobos el sábado cuando iban a ver la primera final de la Copa Libertadores. Otros dos de sus compañeros César Ezequiel Jones y Malcom Vitton también perdieron la vida. Y un quinto, Luciano Carlos Virgilli se encuentra internado en el Hospital Italiano con graves heridas aunque con la esperanza de poder sobrevivir a la terrible pesadilla.
«Franco tenía la carrera prácticamente terminada. Era su gran anhelo recibirse de abogado y regalarle el título a sus padres», contó su amigo Javier Den Dauw. Javier estuvo a punto de compartir el viaje. «Se iba a sumar otro amigo más por lo que iríamos en dos vehículos. Pero al final nosotros no pudimos por razones personales», dijo sin poder contener el llanto.
También habló Mariana Arias, compañera de trabajo y de lucha sindical de Berra. «El quería ser abogado porque decía que debía progresar en la vida. Lo hacía por su mamá, sus hermanas, sus hijos y por supuesto por su padre que ya no tenía. Se nos fue un ángel». Mariana contó que le habían preparado un escrito de agradecimiento por su participación en las paritarias con el gobierno. Había logrado un aumento que beneficia a más de 3.000 trabajadores. Berra era delegado de la Asociación Trabajadores del Estado en la Secretaría de Cultura de la Provincia. Su lugar de trabajo era el Centro Cultural. Ahora, sus compañeros quieren que ese lugar lleve su nombre.
También se supo ayer que Silvestri mantuvo el último mensaje con su madre a las 8:36 del sábado. «Le dijo que llovía mucho, que no se veía nada pero que iban bien», contó su amigo. Unos 40 minutos después se produjo el accidente. Los restos de los cuatro chicos fallecidos cuando la Peugeot Partner en la que viajaban chocó de frente contra una Toyota Hilux a la altura del kilómetro 108 de la ruta 205 en la ciudad de Lobos llegarán mañana martes a la madrugada. Berra, Malcom y Jones serán velados desde las 9 y hasta las 15:30 en el Centro Cultural. Silvestri, que era hijo de Carlos el presidente de la Peña del Xentenario de Boca, será velado en Trelew, donde residía.
Desde la cuenta de Facebook de Javier Canario (amigo de Virgilli) se informó que se suspendía la campaña para juntar fondos para la recuperación de Virgilli en Buenos Aires porque con lo que se recaudó es suficiente. Además, la obra social correrá con todos los gastos. La muerte de los cuatro jóvenes llenó de dolor e impotencia a las ciudades de Rawson y Trelew, ambas aún con perfiles de pueblo chico pero que desde el sábado derraman las lágrimas más grandes.
Clarín