El lunes la policía había detenido en la misma ciudad a un primer sospechoso que pertenece a un «grupo extremista» presuntamente islamista pocas horas después del descubrimiento de los cuerpos de las dos jóvenes.
Los tres detenidos más recientes fueron identificados como Rachid Affati, Ejjoud Abdessamad y Ouziad Younes, y solían frecuentar la zona montañosa en donde ocurrieron los asesinatos.
Las víctimas son dos amigas que pasaban un mes de vacaciones en Marruecos, la estudiante danesa Louisa Vesterager Jespersen, de 24 años, y la noruega Maren Ueland, de 28.
Una de ellas estaba dentro de la carpa mientras que la otra fue encontrada afuera. Según relató la madre de Jespersen a la prensa danesa, su hija fue degollada por los victimarios.
Las autoridades marroquíes no descartaron que el asesinato haya sido cometido por islamistas radicales.
«La pista radical islamista no se descartó debido al perfil del sospechoso detenido y de otros tres hombres buscados que tienen vínculos con el entorno islamista radical», declaró a la AFP una fuente cercana a la investigación, que además se refirió a una condena previa por terrorismo recibida por uno de los sospechosos.
Rasmussen se refirió también a la existencia de un video que presuntamente registra el momento de la muerte de las turistas y está siendo investigado por la fiscalía marroquí.
Al mismo tiempo, el turismo es una de las principales fuentes de ingreso del país, comúnmente visto como un lugar de relativa tranquilidad en el Medio Oriente y el Norte de África, y en 2017 se alcanzó un pico de 11.350.000 de visitantes.
Infobae