Así definió el trabajo humanista de 2018, el director de Discapacidad de Rawson, Jorge Dorado. Apoyo constante a la franja poblacional más vulnerable. “Sin dinero extra, solventamos la ayuda desde nuestro presupuesto municipal”, consignó.
Basado en una estrategia constructiva, contenedora e integradora, la Municipalidad de Rawson diseñó durante 2018 un plan de ayuda humanista focalizada en resguardar y garantizar los derechos de las personas con discapacidad. Capacitaciones, espacios recreativos, o beneficios económicos, fueron las acciones objetivadas en mejorar las condiciones sociales de los más vulnerables.
El camino lo trazó la intendenta de Rawson Rossana Artero al enunciar las pautas del 2018, surgidas en responder las demandas emergentes. No sólo atender las necesidades de la obra pública, o económicas, sino centrar el trabajo en el orden social, visualizado a través de la contención de los más carenciados dentro del sistema.
Los programas o talleres municipales organizados desde la Secretaría de Familia y Promoción Social, bien logrados por Vanesa Freeman y ejecutados con creces por los demás responsables del Gabinete humanitario, alcanzaron un rol preponderante en el ejido capitalino, y posibilitaron la equidad de los actores.
Durante el 2018 “trabajamos con la mirada puesta en los que menos tienen, marcando prioridades y acompañando sistemáticamente a cada familia”, dijo el director de Discapacidad de Rawson, Jorge Dorado, al generalizar la labor desarrollada en el presente año.
“La asistencia de los talleres, y la practicidad de otras de ideas, nos indicó que la estrategia fue acertada”, señaló el funcionario, al marcar 2018 como un período “muy positivo”. Graficó que “avanzamos con varios proyectos que tuvieron impacto en la comunidad, por ejemplo, los talleres como Discapacidad y Familia; Discapacidad y Sexualidad, y Autonomía. También pudimos trabajar en la tecnicatura de Familia y Minoridad, de la Universidad del Chubut, donde coincidimos con el diagnóstico de generar nuevas alternativas para las personas con discapacidad”.
Los trabajos antes mencionados se complementaron con “el taller de Derechos y pudimos, en alguna otra capacitación, asesorar a las personas para tramitar su CUD (Certificado Único de Discapacidad), para que puedan gestionar y acceder al derecho de un transporte libre y gratuito. También concretar una oficina en la terminal para que las personas con discapacidad accedan a este derecho, y buscar las obleas para libre tránsito y estacionamiento”.
Lo que viene
El trabajo realizado en 2018 “nos permite diagramar un 2019 con nuevos encuentros y la posibilidad de ir pensando como comunidad en algún Centro de Día, y otras estrategias que nos permitan abordar más cantidad de usuarios”, definió Dorado. Y ejemplificó: “Asistir hoy con una Tarjeta Social es un paliativo ante la crisis económica que atraviesa el país, esto lo evidencia y lo sufre cada ciudadano, y lo afronta nuestro municipio sin recibir ningún dinero extra. Con esto priorizamos la mirada social en los que menos tienen”.
