España y Francia, dos de los países más afectados por el coronavirus, presentaron hoy planes de liberación gradual de actividades con el reinicio de las clases como una de las medidas más controvertidas, mientras Australia y Nueva Zelanda relajaron sus restricciones tras controlar sus brotes.
Pero al otro lado del planeta, Brasil está convirtiéndose en uno de los epicentros de la pandemia, mientras crecen las dudas sobre si Japón podrá ser sede de los ya pospuestos Juegos Olímpicos el año próximo si para entonces no hay una vacuna contra el virus.
En todo el mundo, una de las cuestiones clave es cuándo podrán abrirse las escuelas como parte del levantamiento gradual de cuarentenas para permitir la reactivación de las golpeadas economías.
Aunque parece que el coronavirus afecta menos seriamente a los niños que a los adultos, autoridades sanitarias, docentes y padres están preocupados por el riesgo para la salud que podría acarrear la reapertura de las escuelas.
Pero también muchos padres tendrían serios problemas para volver a trabajar sin un lugar seguro adonde dejar a sus hijos.
En España, el presidente del gobierno, Pedro Sánchez, anunció un programa de flexibilización de la cuarentena en cuatro etapas de dos semanas cada una, que se pondrá en práctica en forma “asimétrica” según la situación de la pandemia en cada región.
Las clases en general fueron aplazadas hasta septiembre, cuando se iniciará el próximo año lectivo, y solo en la tercera fase podrán abrir establecimientos para niños menores de 6 años cuyos padres deban salir a trabajar y aquellos que realizan pruebas de ingreso a universidades.
En Francia, el primer ministro, Édouard Philippe, presentó ante el parlamento un plan de reanudación gradual de actividades, que incluye la vuelta a clases el 11 de mayo para las escuelas primarias, el 18 para las secundarias -chicos entre 11 y 14 años- y universidades y en junio para los liceos, instancia previa a la universidad, para alumnos de entre 14 y 18 años.
Los padres podrán decidir si mandan o no a sus hijos a la escuela.
En Alemania, los gobiernos de los 16 estados federados acordaron que las clases se reanudarán dependiendo de la evolución del brote en cada una de las regiones, de las necesidades educativas de cada grupo de alumnos y de las posibilidades de los colegios.
En la vecina Austria, que el viernes próximo levantará casi todas sus restricciones y reabrirá incluso hoteles, restaurantes y lugares de ocio, los alumnos de primaria y secundaria volverán a clases entre el 4 y el 29 de mayo.
Grecia, que hasta ahora mantenía una baja cifra de muertos por el virus (136), flexibilizó algunas restricciones desde del próximo lunes y la actividad educativa se reanudará progresivamente a partir del 11 de mayo, con la reapertura de las clases para los que finalizan este año el secundario.
En Estados Unidos, el país con más casos (1,01 millones) y muertes (58.365) por coronavirus, el presidente Donald Trump urgió a los gobiernos de los diferentes estados a “considerar seriamente” reabrir las escuelas públicas antes del fin de ciclo lectivo, en junio, pese a que decenas de ellos ya dijeron que no sería seguro para los estudiantes.
Trump también admitió que los muertos por coronavirus en el país podrían llegar a 70.000, luego de decir varias veces este mes que serían 60.000.
En Nueva York -la ciudad más afectada dentro del estado más castigado por la pandemia-, el alcalde, Bill de Blasio, anunció que las escuelas implementarán un sistema de calificación diferente para la mayoría de los estudiantes, que están cursando clases virtuales.
Según ese esquema, habrá sólo dos notas (“cumple los estándares” o “necesita mejorar”) para los alumnos de jardín de infantes a quinto grado y tres (“cumple los estándares”, “necesita mejorar” o “curso en progreso”) para los de sexto a octavo.
En Nueva Zelanda, que sólo contabilizaba 1.124 contagios (dos en el último día) y 19 muertes por coronavirus, unos 400.000 trabajadores regresaron hoy a sus labores, al autorizarse la reapertura de 75% de las actividades, y mañana abrirán las escuelas pero solo para los pocos estudiantes que no puedan realizar actividades de manera remota.
Asimismo, en Australia (6.725 contagios y 84 muertes) reabrió hoy la famosa playa Bondi Beach, en Sydney, que se llenó de personas que solo pueden estar allí de día y deben mantener el distanciamiento social.
En todo el mundo había esta tarde 3,11 millones de casos confirmados y 216.808 muertes por coronavirus, según la base de datos en línea de la Universidad Johns Hopkins, o 2,95 millones de contagios y 202.597 decesos, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), que actualiza su balance sólo una vez por día.
Uno de los casos más preocupantes era el de Brasil, que batió su récord de muertes por coronavirus en un día, con 474; acumulaba hoy 71.886 contagios y 5.017 decesos, según reportó el Ministerio de Salud, y se afianzaba como el undécimo país en cantidad de casos confirmados y el noveno por fallecimientos.
En Japón, en tanto, el presidente de la Asociación Médica, Yoshitake Yokokura, dijo que será difícil que el país pueda realizar los reprogramados Juegos Olímpicos incluso en 2021 sin una vacuna efectiva contra el coronavirus.