A una semana de las elecciones de EE.UU., Donald Trump apuntó directamente al corazón del medio oeste con promesas de proteccionismo comercial y ayuda a las industrias de combustibles fósiles, mientras que su rival, Joe Biden, se atrevió a cortejar a Georgia, donde un demócrata no gana desde 1992.
«¡Estas elecciones son una cuestión de supervivencia económica para Michigan!», clamó Trump durante un mitin en el aeropuerto de Lansing, la capital estatal.