Jubilados estatales y retirados de Policía volvieron a encadenarse en la puerta del Instituto de Seguridad Social y Seguros (ISSyS) en reclamo de los haberes atrasados y el medio aguinaldo del mes de junio.
A diferencia de lo ocurrido hace un par de semanas atrás, la medida se llevó a cabo de manera simultánea en el resto de la provincia.
“Es lamentable lo que estamos padeciendo, no ha venido ni siquiera un concejal aunque sea a traer una botella de agua. Nos están faltando el respeto, nosotros somos personas educadas, pero se nos están juntando los meses, el aguinaldo casi completo y la gente no da más, llegamos a un límite. Vamos a tener que endurecer las medidas, cosa que nosotros no queremos, pero este gobierno no tiene corazón”, dijo el suboficial Mayor (RE) Julio César Moreyra.
Este encadenamiento simbólico comenzó a primera hora de la mañana y se extendió durante algunas horas, a pesar de que el sol pegaba fuerte sobre las cabezas de los jubilados y retirados. Moreyra hizo hincapié en aquellos pasivos que viven en el interior de la provincia, en las zonas más postergadas y afirmó que “los compañeros están en una situación muy crítica, no tienen ni para comprar una bolsa de papas, ni de cebollas ni de harina. Ellos están solos allá, nosotros acá podemos tener algún trabajito extra, pero ellos allá nada”.
La falta de apoyo desde el sector político es una de las cosas que más duele a estas personas que aportaron a lo largo de 30 o 40 años y que nunca esperaban verse en una situación como la actual: “Nadie viene, por lo menos que nos digan ´bueno muchachos, estoy con ustedes o los apoyo’.
Hablan del partido peronista, justicialista, de la megaminería, pero el pueblo se está muriendo de hambre. Nosotros no estamos reclamando nada de lo común, solo estamos pidiendo los sueldos que nos hemos ganado, nada más”, señaló El Chubut.