Si algo se sabe sobre el coronavirus, es que la cantidad de síntomas que puede presentar es tan amplia como variada. Si bien los principales son similares a los de una gripe -tos, fiebre y cansancio-, también se le suma la falta de olfato y gusto como una consecuencia frecuente.
Sin embargo, pacientes que transitaron la enfermedad reportaron otros indicios de la patología, algunos de los cuales pueden ser tan extraños como el que manifestó en Gran Bretaña un hombre de 69 años: su piel se puso de color amarillo, indicó diario Clarín.
Lenny Jones tuvo que ser internado en un hospital después de que comenzara a tener ictericia y le faltara el aire.
Los médicos creen que él es una de las 12 personas en el país que manifestaron ese síntoma en relación con el Covid-19 después de que dio positivo por el virus al momento de su admisión.
Describiendo el episodio, Jones relató: “Me desperté una mañana y pensé que había algo mal con el espejo de la habitación, porque estaba amarillo, tenía ictericia y, para decirlo claramente, me parecía a Bart Simpson”.
Para ayudarlo a recuperarse y enfrentar este síntoma poco frecuente, los médicos tuvieron que hacerle una transfusión de sangre.
Entre las seis personas que había en la sala de pacientes con coronavirus, Jones era el único que no necesitaba respiración asistida. “Me sentí devastado de estar allí, fue tan perturbador”, contó. Y agregó: “No pude ver a mi esposa ni nada. Las únicas personas que venían era cuando algún paciente moría, así que no sabía si iba a lograrlo”.
Tras haber pasado once noches en la sala, a lo largo de las cuales presenció escenas que jamás olvidará -“Mi cama apuntaba hacia la recepción y pude ver a algunas de las enfermeras llorando cuando descubrían que algún paciente había fallecido durante la noche”, rememora-, Lenny Jones salió del hospital y fue despedido con aplausos antes de volver a su casa, en Connah’s Quay.
“Yo era un hombre de 69 años que estaba en forma, ahora soy un desastre de 69 años -afirmó conmocionado-. Pero estoy muy agradecido de estar aquí y quiero agradecer a todas las enfermeras y médicos; lo que están haciendo es extraordinario. Desde el personal de limpieza hasta el médico, todos merecen una medalla”.