La ministra de Salud, Carla Vizzotti, dijo este lunes que la vacuna «no es magia, es una herramienta más» para minimizar el impacto de una segunda ola de coronavirus, recalcó que el esfuerzo de la sociedad «tuvo resultados» y explicó que, si aumentaran los casos, «se piensa en acciones muy puntuales, como disminuir la circulación de personas en forma focalizada y oportuna».
En una rueda de prensa con periodistas, la funcionaria explicó que el objetivo principal del plan de vacunación «a corto plazo» es bajar la mortalidad y con ese motivo insistió con que las medidas de cuidado siguen siendo indispensables.
«Este redoblar la atención es para darnos tiempo a vacunar primero a quien tiene riesgo de morir. Entonces, aunque tengamos más casos vamos a tener un impacto en la mortalidad, porque ningún país del mundo todavía pudo interrumpir la circulación del virus», dijo.
Las restricciones
De esta manera, «aunque haya casos y circule el virus, no se tensa el sistema de salud, se pueden atender otras patologías, el equipo de salud no se agota», dijo en una conferencia en la que estuvo acompañada por Juan Manuel Castelli, director nacional de Control de Enfermedades Transmisibles, y Analía Rearte, directora nacional de Epidemiología y Análisis de la Situación de Salud.
Vizzotti puso como ejemplo lo que sucedió en diciembre, que se pudo detener el avance de casos «cuando se restringió la circulación y se volvió a percibir el riesgo».
Entonces «se estabilizó», remarcó, y «ese esfuerzo tuvo un resultado, ya que pudimos sostener el turismo, que se hayan movilizado 12 millones de personas este verano, que tengamos este desafío de la presencialidad en la educación. Hace que se trabaje en el monitoreo sosteniendo las actividades comerciales, productivas y la economía sin desatender la salud y que se piense en acciones muy puntuales, como disminuir la circulación de personas en forma focalizada y oportuna».
Vizzotti insistió en la necesidad de «poner en valor el esfuerzo que hizo la sociedad desde principios del año pasado en relación con las medidas de cuidado, distanciamiento físico, incorporar el tapabocas. Fue un proceso que sucedió mientras se fortalecía el sistema de salud, que es algo muy concreto: aumentaron las camas de terapia casi en un 50%, los respiradores en un 60%, y eso es algo que hizo que nuestro sistema de salud pudiera dar respuesta siempre. Es contrafáctico lo que hubiera sucedido, pero ese objetivo se cumplió y no podemos perder de vista que el esfuerzo valió la pena», puntualizó.
En esa dirección, planteó que ahora hay evidencia científica de cuáles son las actividades de alto y bajo riesgo.
«Sabemos que, con protocolos, en actividades productivas, comerciales, sociales, inclusive turismo, disminuye muchísimo el riesgo», precisó.
Fuente: Canal 12