El Servicio Meteorológico Nacional advirtió sobre las consecuencias de la falta de agua en Chubut por la sequía y presentó un desalentador panorama a futuro.
Por medio de un informe especial, indicó: «varias regiones de la Argentina sufren las consecuencias de una prolongada e intensa sequía, que como ya se observó, produce diversos impactos en sectores de la actividad productiva y preocupa a expertos y autoridades».
«La situación se perfila compleja y en el horizonte las noticias no son alentadoras», alertó.
La explicación:
«Durante el último trimestre, que corresponde a mayo-junio-julio, se intensificó el déficit de precipitaciones en todo el sur y oeste de la Patagonia, y se amplió también a la cordillera de Cuyo. Los acumulados de precipitación estuvieron muy por debajo respecto a los valores normales para la época», se indicó.
«200 mm por debajo del promedio climatológico (1981-2010). Las zonas cordilleranas de estas regiones del país suelen tener su máximo de lluvias en esta época del año, pero actualmente estamos ante un panorama completamente inverso. En consecuencia, se presenta una situación de sequía», añadió el organismo.
Además, agregó que «el déficit de precipitaciones también se refleja en la falta de nieve durante el trimestre mayo-junio-julio 2021 en la Patagonia y Cuyo (incluido el cordón cordillerano), la cual puede observarse por medio de imágenes satelitales si comparamos con el mismo trimestre pero del año 2020, En detalle, se marca en el 2021 una gran disminución de la superficie con nieve, en especial la región patagónica».
«Patagonia: el sector Norte presenta también los valores más bajos desde el 2000, situación completamente opuesta al 2020, la cual presentaba una máxima extensión del fenómeno en la región. En cuanto a los valores normales, no se registraba inferior al promedio desde 2015. En el sector Sur, el trimestre mencionado es el segundo más bajo desde el 2000, sólo superado por el mismo trimestre del 2015», se puntualizó.
Varias ciudades patagónicas y cuyanas presentaron una baja frecuencia (cantidad) de días con nieve entre marzo y julio, destacándose, por ejemplo, Bariloche y Esquel con 10 a 11 días menos respecto a los valores normales (periodo marzo-julio 1981-2010).
Sobre toda la región domina un patrón de circulación atmosférica que disminuyó la frecuencia de avances de frentes fríos, con sistemas de altas presiones que impiden la formación de precipitaciones y favorecen temperaturas más cálidas que lo normal, se indicó.
Pero además, se anticipó que «en el próximo trimestre, que contempla a agosto-septiembre-octubre 2021, el pronóstico no es alentador»:
«Mayor probabilidad de que la precipitación sea normal o inferior a lo normal en casi toda la región de interés. La excepción sería sobre el sur de la Patagonia, donde hay mayor probabilidad de ocurrencia dentro de los rangos normales. En cuanto a las temperaturas, se puede esperar un trimestre más cálido que lo normal en Cuyo y el sur y este de Patagonia. En el oeste patagónico, temperaturas normales o superiores a lo normales con igual probabilidad de ocurrencia», puntualizó el informe.