A partir del 1 de diciembre, Chile amplía los pasos fronterizos habilitados para el ingreso y egreso de su país y esta medida modifica la situación actual del paso Pino Hachado, ubicado en el norte neuquino, que quedará abierto para el flujo de personas, mientras que el paso Cardenal Samoré, lindero con Villa La Angostura, se habilitará el 1 de enero.
El anuncio lo realizó la subsecretaria de Salud Pública de Chile, Paula Daza, y el ministro de Economía, Lucas palacios, quienes confirmaron cambios en el plan Fronteras Protegidas que establece el vecino país.
Actualmente Chile exige para el ingreso a su país de residentes o extranjeros, un test PCR negativo realizado 72 horas antes, además se realiza un test de antígenos a todas las personas que ingresan (costeado por el pasajero) y establece un aislamiento obligatorio de 5 días para quienes ingresan por vía terrestre.
Adicionalmente, los extranjeros no residentes deberán tener un seguro médico desde 30 mil dólares que cubra enfermedades asociadas a COVID-19 y su trámite de validación de vacunas aprobado por el Ministerio de Salud de Chile.
Las personas con dosis de refuerzo de vacunas no tendrán que hacer aislamiento ni un test diagnóstico luego de entrar al país, según anunciaron ayer las autoridades chilenas.
La subsecretaria Daza explicó en conferencia de prensa que «se eliminan las restricciones de salida, pero se mantendrán las exigencias de entrada al país por los pasos fronterizos habilitados»
Actualmente, los aeropuertos de Santiago, Iquique, Antofagasta y Punta Arenas se encuentran habilitados para entrar al país. A partir del 1 de diciembre se ampliarán los pasos fronterizos y se habilitarán ingresos terrestres por Chacalluta, en la Región de Arica y Parinacota; Colchane, en Tarapacá; y, Pino Hachado, en La Araucanía.
A partir del 1 de enero se habilitarán los pasos fronterizos terrestres de Los Libertadores, Cardenal Samoré y Río Don Guillermo.
Fuente: EQS Notas