El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh) documentó 77 ejecuciones sumarias de civiles y cerca de 900 casos de detenciones arbitrarias por parte Rusia en los territorios ocupados en Ucrania desde el inicio de la invasión, mientras que señaló que Kiev es responsable de arrestar sin fundamento a 75 personas «sospechosas de infracciones relacionadas con el conflicto», informó este martes el organismo.
«Es un crimen de guerra y una violación flagrante del derecho humanitario internacional«, subrayó Matilda Bogner, responsable de la oficina en Ucrania del Acnudh en un encuentro con la prensa.
La ONU documentó 864 casos de detención arbitraria por parte de Rusia y subrayó que «las fuerzas armadas rusas, las fuerzas del orden y las autoridades penitenciarias» efectuaron «actos de tortura y malos tratos generalizados contra detenidos civiles».
El informe presentado en Ginebra abarca el período comprendido entre el 24 de febrero de 2022, cuando comenzó la invasión rusa, y el 23 de mayo de este año.
Documenta en total más de 900 casos de detención arbitraria de civiles, incluidos niños y ancianos: «La gran mayoría de esos casos fueron perpetrados por la Federación Rusa», señala el trabajo.
Torturas y desapariciones
Del lado ucraniano, el Acnudh «documentó 75 casos de detención arbitraria por las fuerzas de seguridad ucranianas, principalmente de personas sospechosas de infracciones relacionadas con el conflicto».
«Una proporción importante de esos casos fueron también desapariciones forzadas, perpetradas principalmente por el Servicio de Seguridad de Ucrania», agregó.
«Más de la mitad de las personas detenidas arbitrariamente fueron torturadas o maltratadas por las fuerzas de seguridad ucranianas. Esto ocurrió mientras las personas estaban siendo interrogadas, en general inmediatamente después de su arresto», según el informe.