Esta semana, el Tesoro Nacional planea emitir deuda en pesos, y los inversores esperan que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) acompañe con una nueva baja de tasas para favorecer la colocación. Según informes del sector, se prevé que este jueves se anuncie una reducción en las tasas de interés que impactará directamente en los rendimientos de los plazos fijos.
Luis Caputo, ministro de Economía, enfrenta vencimientos de deuda que ascienden a unos $2,5 billones, con el objetivo de igualar o superar esa cifra en la nueva emisión, para refinanciar la deuda existente. En el pasado, el gobierno ha recurrido a bajas en la tasa de referencia del BCRA, que incentiva a bancos e inversores a optar por títulos del Ejecutivo buscando mejores rendimientos, en lugar de las tasas más bajas de los pases pasivos.
El mercado, que ya ha observado esta estrategia en tres ocasiones durante el último mes, anticipa una reducción moderada de la tasa de política monetaria, que podría ser de alrededor de 5 puntos porcentuales, dejando la tasa efectiva mensual en aproximadamente 3,75%. Esto contrasta con las últimas tres reducciones, cada una de 10 puntos, que llevaron la tasa de referencia del 133% al 50% anual.
Impacto en los Plazos Fijos
Si la reducción se confirma, los ahorristas que deseen aprovechar las tasas actuales tendrán un margen muy limitado para realizar depósitos a plazo fijo al 40%, antes de que las nuevas tasas entren en vigor. Actualmente, el promedio de tasas ofrecido por los 25 principales bancos se sitúa en el 40%, con los más competitivos ofreciendo hasta el 42%, y los más bajos alrededor del 34% anual.
Un nuevo ajuste a la baja podría reducir el rendimiento de estos depósitos a cerca del 35% nominal anual. Por ejemplo, un plazo fijo de $100,000 al 40% actual generaría $103,287.67 al cabo de 30 días. Con un recorte de cinco puntos, este rendimiento disminuiría a $102,876.71, reflejando una tasa de interés mensual del 2.88%.
Este ajuste en las tasas no solo afectará a los nuevos plazos fijos sino que podría modificar significativamente la estrategia de inversión de los ahorristas y la dinámica del mercado financiero local. La decisión final sobre las tasas será crucial para las estrategias a corto y largo plazo tanto para inversores como para el gobierno.