La atención se encuentra centrada por estas horas en el Senado de la Nación, donde se llevan a cabo intensas negociaciones y discusiones entre el oficialismo y la oposición de cara al tratamiento que se dará el próximo miércoles de la Ley de Bases y el paquete fiscal.
La disputa política se desarrolla en un marco de final abierto, donde las posiciones se encuentran aún distantes y las posibilidades de consenso son inciertas. Por lo que se espera que sea una sesión larga, tensionada, cargada de chicanas y muchas sorpresas.
Los jefes de bloque se reunieron el lunes para avanzar en los pormenores del tratamiento. Es posible que la presidenta del cuerpo legislativo, Victoria Villarruel, no esté al frente de la sesión, ya que seguramente asumirá la presidencia de la Nación debido al viaje del presidente Javier Milei al exterior, según publica TN.
Mientras tanto, en el gobierno nacional buscan llevar tranquilidad al sector empresario y aseguran que cuentan con los votos para sancionar el proyecto. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, indicó que el oficialismo tiene asegurados 38 votos positivos –de acuerdo a este esquema la votación quedaría 38 a 36-.
El Gobierno tendrá que asegurarse la conformación del quórum para la sesión y después, según los planes del espacio libertario, la aprobación en general.
En tanto, desde la oposición niegan que el oficialismo cuente con 38 votos y señalan que hay un virtual empate (36 a 36 votos).
El oficialismo contempla, en rigor, que puede haber muchos cambios en la legislación, con la consecuente licuación de muchos artículos; algunos de ellos, clave. Dicho de otro modo, el Gobierno apunta a una aprobación en general y una licuación en particular.