Argentina virus sincicial respiratorio en bebés. Desde hace años, los virus respiratorios, especialmente el Virus Sincicial Respiratorio (VSR), son una preocupación para la salud infantil, sobre todo entre los recién nacidos y niños pequeños.
En ese sentido, el Virus Sincicial Respiratorio (VSR) tiene a los recién nacidos como el target más dramático y vulnerable, ya que es la principal causa de infecciones respiratorias agudas bajas, incluyendo la bronquiolitis y la neumonía, así como de hospitalizaciones, en bebés y niños pequeños en todo el mundo. Ocasiona epidemias estacionales cada año, con casi 33 millones de infecciones y cerca de 3,6 millones de hospitalizaciones a nivel mundial.
En este contexto, como adelantó Infobae, la aparición de nuevos tratamientos preventivos marca un avance significativo. En Argentina, ya está disponible el anticuerpo monoclonal inyectable Nirsevimab, desarrollado por los laboratorios Sanofi y AstraZeneca, que se aplica en una única dosis intramuscular para prevenir el VSR en bebés.
Este tratamiento mostró en ensayos clínicos una reducción del 83% en las hospitalizaciones por infecciones respiratorias causadas por el virus, y se enfoca principalmente en lactantes durante su primera temporada de exposición al VSR, así como en niños hasta los 24 meses con enfermedades de base.
Argentina tuvo un rol destacado en los ensayos clínicos, con la participación de centros médicos como el Hospital de Niños de Tucumán, cuyos datos obtenidos mostraron que esta terapia previene cerca del 75% de las infecciones respiratorias por VSR. La aprobación por agencias internacionales como la EMA y recomendaciones de organismos como la FDA subrayan su potencial para reducir el impacto de esta enfermedad en niños vulnerables. Por todo esto es que la aparición de una nueva inmunización innovadora para frenar el avance y la virulencia del VSR se convierte en una noticia muy relevante.
“En Argentina, se registran anualmente entre 250.000 y 300.000 casos de infecciones por VSR y es la primera causa de bronquiolitis y neumonía en niños. El virus provoca una infección respiratoria que puede afectar a cualquier niño, incluyendo también a bebés sanos. En las internaciones el promedio de edad es de entre 6 y 7 meses”, señaló el doctor Fernando Burgos, médico pediatra, jefe de la sección ambulatoria del Hospital Austral y miembro del Departamento Científico de la Fundación Vacunar.
Para dimensionar el impacto que el VSR genera año tras año, dos de cada tres lactantes se infectan con este virus durante su primer año de vida y, si bien los síntomas pueden ser leves y similares al resfrío, la infección puede progresar inesperadamente a una enfermedad pulmonar más severa y, de hecho, produce un tercio de las muertes en menores de un año. La enfermedad es impredecible, cualquier lactante puede enfermarse seriamente y ser hospitalizado debido al VRS.
“Durante los meses de frío, es habitual que las guardias y las camas de internación estén saturadas en centros de salud por causa de estas infecciones respiratorias en los más pequeños. En ese sentido, la llegada de herramientas preventivas es una gran noticia, ya que hasta hace poco tiempo no contábamos con inmunizaciones contra este virus”, sostuvo el doctor Burgos.
“El VSR es un estresor directo generando la enfermedad y también indirecto porque una familia que tiene un hijo internado sufre una disrupción significativa. Además, la infección por VSR puede tener consecuencias a largo plazo. Algunos niños que la padecen pueden desarrollar problemas respiratorios recurrentes, como bronquitis obstructiva, o incluso asma”, agregó.
La doctora Vanesa Castellano, médica especialista en pediatría, staff del área de epidemiología del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez y Directora Médica del Departamento Científico de la Fundación Vacunar, destacó: “Después de décadas de investigación, se están poniendo a disposición nuevas soluciones de inmunización contra el VSR. Una de ellas es la vacunación materna y, para los niños no protegidos por esta estrategia, la novedad es que ya está disponible en Argentina nirsevimab, un anticuerpo de acción prolongada que brinda protección rápida y directa con una única dosis para la prevención del VSR”.
“El anticuerpo puede ser aplicado a los recién nacidos y a los menores de 12 meses que enfrentan su primera temporada de VSR, incluidos los recién nacidos sanos, a término o prematuros, o con condiciones médicas específicas. También puede ser utilizado para niños de hasta 24 meses de edad que siguen siendo vulnerables a la enfermedad grave por VRS hasta su segunda temporada de VSR”, añadió la especialista.
“Este anticuerpo, que ya protege a bebés en más de 20 países, ha demostrado un muy buen perfil de seguridad en los diferentes grupos etarios y permitió lograr una reducción de las hospitalizaciones cercana al 80%, lo que representa un gran avance en la disminución de complicaciones por esta infección -continuó la experta-. Al ser un anticuerpo, con una inyección, el bebé está protegido poco tiempo después de recibir la inmunización y puede ser administrado junto con otras vacunas pediátricas”. Esta nueva inmunización ya está disponible en los principales vacunatorios privados del país.
La introducción del anticuerpo en otros países ha demostrado un impacto significativo en la reducción de hospitalizaciones por el Virus Sincicial Respiratorio (VSR) en lactantes. Estudios recientes en España, por ejemplo, estiman que ayudó a prevenir aproximadamente 9.900 hospitalizaciones por VSR en niños menores de 1 año durante la temporada 2023-2024.
Estos datos subrayan el potencial del anticuerpo para proteger a los lactantes argentinos de infecciones graves, siguiendo el éxito observado en otras regiones.
El doctor Federico Martinon Torres, pediatra infectólogo jefe y coordinador del servicio de Pediatría del Hospital Clínico Universitario de Santiago, en Galicia, España, destacó que “la profilaxis universal en lactantes con nirsevimab ha mostrado una efectividad y un impacto muy significativos en Galicia. En esta segunda temporada de implementación, la aceptación por parte de los padres continúa siendo la norma, con coberturas por encima del 92%”.
En septiembre 2024 se publicó un documento intersocietario sobre la prevención del VSR, del que participaron la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE), la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), la Sociedad Argentina de Infectología (SADIP), la Federación Argentina de Sociedades de Ginecología y Obstetricia (FASGO) y la Sociedad de Obstetricia y Ginecología de Buenos Aires (SOGIBA), entre otras instituciones.
“Estas recomendaciones destacan la importancia de la prevención del VSR con una estrategia que incluya, además de la vacunación materna, el uso de anticuerpos para cubrir a todos aquellos niños no protegidos con la estrategia de vacunación materna, y que están en riesgo durante su primera temporada. Es decir, los nacidos antes del inicio de la temporada de circulación del virus, los nacidos pretérmino y los nacidos en temporada de madres que no fueron vacunadas o madres vacunadas cuyos bebés nacieron antes de los 14 días de la vacunación, y también los menores de 2 años que estén dentro de los grupos de riesgo”, señaló la doctora Castellano. “Es necesario integrar las estrategias disponibles para maximizar la protección de los niños contra el VSR”, añadió.
En el hemisferio sur, incluyendo Argentina, la circulación del virus es estacional, alcanzando su pico de abril a septiembre.
Los síntomas de infección respiratoria aguda son rinitis, tos, dificultad para respirar, sibilancias (silbido al respirar) y en ocasiones, fiebre. Ante cualquiera de estos síntomas en niños pequeños, es importante realizar una consulta médica.
Tal como se mencionó en Infobae en una nota anterior, el VSR no solo afecta a lactantes y niños pequeños, sino también a adultos mayores y personas con enfermedades crónicas. En Argentina, se producen hospitalizaciones y muertes anuales debido a complicaciones por VSR, aunque su impacto en adultos suele estar subestimado.
A pesar de su impacto, el VSR suele estar subdiagnosticado en adultos, ya que sus síntomas pueden confundirse con los de la gripe o el COVID-19.
La prevención se ha fortalecido con la inclusión de la vacuna para embarazadas en el Calendario Nacional de Vacunación, que se aplica entre las semanas 32 y 36 de gestación y genera protección pasiva para los recién nacidos. Además, en Argentina se encuentran disponibles vacunas específicas para adultos mayores, desarrolladas por los laboratorios GSK y Pfizer, que han demostrado reducir significativamente el riesgo de enfermedad grave y hospitalización.
Los especialistas enfatizan la importancia de combinar estrategias de inmunización para reducir el impacto del VSR en la población. “Es necesario integrar las estrategias disponibles para maximizar la protección de los niños contra el VSR”, destacó la doctora Castellano. La combinación de vacunación materna, anticuerpos monoclonales y vacunas para adultos mayores representa un avance significativo en la lucha contra este virus que afecta a múltiples grupos etarios.