La Secretaría de Presidencia, a cargo de Karina Milei, incrementó un 46,4% su presupuesto en lo que va del año, casi 30 puntos por encima de la inflación acumulada.
Sin embargo, la partida destinada a «seguridad, logística y comunicaciones» experimentó un aumento sin precedentes del 2.400%, pasando de $292 millones a $7.297 millones.
Asignación Discrecional y Desequilibrada
De las ocho actividades bajo la órbita de la Secretaría de Presidencia, solo dos incrementaron sus recursos: «coordinación técnica y administrativa» (que subió un 37,5%) y «seguridad, logística y comunicaciones» (con un aumento del 2.398%). Mientras estas partidas se expandieron de manera significativa, los fondos para la vicepresidencia se mantuvieron en $3,82 millones, de los cuales no se ejecutó ni un peso, y los destinados a la restauración de la Casa de Gobierno se redujeron a cero.
Comparación con Otras Áreas y Contexto Inflacionario
El aumento total de la Secretaría de Presidencia ($22.950 millones) supera ampliamente la inflación acumulada del 17,3% y contrasta con las asignaciones a instituciones críticas como el Hospital Garrahan, que recibió un incremento del 9,8%, quedando por debajo de la suba de precios. Este crecimiento desproporcionado también refleja una tendencia histórica: en 2024, el gasto ejecutado en logística y comunicación superó en un 3.324% lo presupuestado inicialmente.
Impacto Social y Transparencia
Mientras los recursos para comunicación se disparaban, las transferencias corrientes al sector privado cayeron un 27,3% en términos reales, afectando principalmente subsidios y complementos previsionales. La jubilación mínima, incluso con el bono de $70.000, registró una caída interanual del 2,7% ajustada por inflación, profundizando la pérdida de poder adquisitivo de los adultos mayores. PERFIL consultó a fuentes oficiales sobre estas discrepancias, pero no obtuvo respuesta.
La drástica redistribución de recursos dentro de la Secretaría de Presidencia genera interrogantes sobre la priorización del gasto público en un contexto de ajuste y crisis social. La falta de transparencia en la ejecución presupuestaria y las enormes asimetrías entre partidas alimentan el debate sobre la eficiencia y equidad en la administración de los fondos estatales. La información fue reportada inicialmente por el medio PERFIL.