La Comisión Directiva de San Lorenzo quedó formalmente acéfala luego de una jornada tensa donde catorce dirigentes, la mayoría de sus miembros, presentaron sus renuncias.
Marcelo Moretti, aún presidente, no firmó el acta y anunció que impugnará la medida ante la justicia, mientras el club inicia el proceso para elegir una nueva conducción.
Tras una caótica reunión de Comisión Directiva interrumpida por citaciones judiciales, San Lorenzo comunicó oficialmente que su gobierno ingresó en estado de acefalía. Según informó el club a través de sus canales oficiales, la mayoría de sus dirigentes renunció, desencadenando el procedimiento establecido en el estatuto. Marcelo Moretti, el presidente saliente, no firmó el acta que decreta esta situación y ya anunció que buscará su impugnación en los tribunales.
Un proceso institucional que inicia bajo conflicto
El anuncio oficial del club fue contundente: catorce miembros de la Comisión Directiva, entre titulares y un suplente, ratificaron sus renuncias. Esta masa crítica, que incluía a nombres como Julio Lopardo, Andrés Terzano y Carina Farías, permitió configurar la acefalía. Sin embargo, cinco dirigentes, encabezados por Marcelo Moretti y Néstor Ortigoza, decidieron no renunciar.
Con el gobierno acéfalo, la presidencia recaerá transitoriamente en Daniel Matos, titular de la Asamblea de Representantes, quien tiene la urgente misión de convocar a dicho cuerpo en las próximas 48 horas para que designe una Comisión Transitoria. Esta nueva comisión será la encargada de organizar las elecciones definitivas en un plazo máximo de noventa días.
Moretti no da su brazo a torcer: impugnación judicial en camino
A pesar del resultado de la reunión, Marcelo Moretti dejó clara su postura de no aceptar la legitimidad del proceso. El mandatario azulgrana abandonó la reunión en dos oportunidades y se negó a firmar el acta final, la cual fue proporcionada a la prensa por otro de los directivos que permanece, Christian Evangelista.
Informo el medio TyC, Moretti fue categórico: «Vamos a impugnar el acta que supuestamente decretó la acefalía, tiene un montón de vicios». El presidente cuestionó la normalidad del procedimiento y lo calificó como un intento de «golpe de estado» por parte de sus pares, con quienes mantiene una disputa pública desde hace meses. Su estrategia será, una vez más, judicializar la crisis interna del club.
El ciclo de Moretti parece haber llegado a su fin de manera formal para la mayoría de la dirigencia, pero su resistencia judicial asegura que el camino hacia la normalización institucional del «Ciclón» estará lejos de ser tranquilo.




