Los vecinos del barrio Presidente Néstor Kirchner de Rawson denunciaron enormes problemas edilicios en las viviendas que fueron construidas por el MOCARA y entregadas hace solo un año. Casas a medio terminar, sin calefactores, vanitorios rotos, rajaduras de paredes, filtraciones de agua, incendios de cables y faltas de rejillas en las tomas de aire son algunas de las muchas irregularidades denunciadas.
Una veintena de vecinos se reunieron ayer con la intendenta Rossana Artero para solicitarle que interceda ante las autoridades del Movimiento de Cascos Amarillos de la República Argentina para encontrar una solución a este problema que afrontan.
“Vinimos a ver a la intendenta porque con Joanna Peralta (titular del MOCARA) no podemos hablar, nos trata como animales. Si vamos a la fábrica (ex Elastax, donde funciona el MOCARA) nos tratan muy mal, cada vez que vamos nos dicen ‘tras que los sacamos de la calle, vienen acá a reclamar’ y no nos dan respuestas”, aseveró Carol Delgado, una de las vecinas del barrio.
“Mi casa está pasada por agua y la solución que me dio la arquitecta del MOCARA fue que la pinte con vinagre y que espera a que se seque. Cada vez que llueve se nos mete el agua a la casa, las ventanas chorrean, no me entregaron los caloramas, ni las rejillas de las tomas de aire y los vanitorios estaban rotos. Es muy difícil vivir así”, se lamentó Delgado.
Para la construcción del barrio Presidente Néstor Kichner, la municipalidad de Rawson donó las tierras a la Asociación Civil Hábitat y la obra fue ejecutada por el MOCARA a través de las Cooperativas de Trabajo “4 de Mayo” y “Cascos Amarillos”.
El 14 de octubre de 2014 se hizo en acto de entrega de las viviendas donde cada beneficiario recibió un acta de entrega que les sirvió para tomar posesión pero no los convirtió en propietarios.
Zulma Debastiani, otra vecina del barrio, expresó que “el problema más grande que tenemos en las casas es que no tenemos mensura para escriturar y tampoco tenemos un contrato así que estamos colgados, no existimos, no podemos pedir un servicio ni nada”.
“Tampoco podemos acceder a créditos porque no figuramos como dueños, cuando nos entregaron las casas nos dieron un papel de resolución de entrega que no sirve para nada, fue algo que se uso para la foto y nada más”, resaltó Delgado.
Contrato extorsivo
“A las dos semanas de ingresar a las casas nos llamaron de la fábrica para intimarnos a firmar un contrato de pago de cuota recupero o nos quedábamos sin la vivienda. Nos amenazaron con que tenían una lista muy holgada de gente con necesidades así que teníamos que ir”, recordó Delgado.
El contrato firmado obliga a los beneficiarios pagarle a la titular de la Asociación Civil Hábitat, Andrea Figueras, 240 mil pesos repartidos en 240 cuotas de 1.000 pesos, más un interés mensual del 2,3 por ciento. Además, el deudor acepta que el título de propiedad del inmueble hipotecado sea retenido por el acreedor hasta tanto el crédito y los intereses sean pagados, entre otras cláusulas.
“Lo primero que pensé fue en mis 6 hijos, tuve miedo por ellos y fui a la escribanía a firmar. Me costó 3 meses poder retirar una copia de ese contrato porque la señora Andrea Figueras no me lo quería entregar”, manifestó Delgado.
Debastiani afirmó que “el contrato es muy perjudicial para nosotros, dicen que pueden ingresar a nuestra vivienda cuando quieren, si nos demoramos el pago por 3 meses nos retiran la vivienda. Y hay que aclarar que cuando iniciamos con todo esto nunca nadie nos dijo que teníamos que pagar por las casas, jamás. Esto era algo social, Nación bajó los fondos, el municipio puso los terrenos y nosotros, la mano de obra”.
Los vecinos recorrieron varios estudios de abogados buscando ayuda para dar de baja esos contratos pero hasta el momento no tuvieron suerte.
Redes sociales
Los problemas entre los vecinos y las autoridades del MOCARA se extendieron a las redes sociales. “Tanto Joanna como su marido Pablo Hualpa se encargaron por Facebook de basurear y ningunear a cada uno de los integrantes de este barrio. Hualpa dice que nos sacó de la plaza, cosa que nos es así, esas tierras fueron entregadas por el municipio y construyeron viviendas con fondos de Nación, con los cuales los propietarios del MOCARA se construyeron grandes mansiones en Trelew y no tienen que pagar un solo peso. En cambio, a nosotros nos obligan a pagar una cuota, no nos dan respuesta a las rupturas que tenemos en nuestras casas”, sentenció Delgado.