Se trata de una planta «piloto» para la producción de uranio en Cerro Solo, yacimiento ubicado en el centro de la meseta chubutense y que de acuerdo al Código Minero es propiedad de la Comisión Nacional de Energía Atómica. La obra aparece al pie del listado de 39 ejecuciones que Nación financiará en Chubut y según el diputado Santiago Igon fue incluida a último momento. De acuerdo al Presupuesto 2017, que ya tiene media sanción de la Cámara baja, la obra estará concluida en 2019.
En Chubut la explotación minera está expresamente prohibida por la Ley 5001, aunque solo abarca a la producción metalífera, mientras que el uranio, de condición nuclear, está considerado como un combustible. Además, mientras los permisos de cateo y exploración se extienden bajo la figura de concesiones, el Código Nacional Minero estableció que el yacimiento uranífero Cerro Solo es «propiedad» de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA).
Eso implica que Nación tiene las potestades para decidir si explota o no en territorio chubutense donde, por marcos legales, el proyecto requiere del tan mentado «consenso social» para ser explotado y atravesar las instancias administrativas provinciales para obtener autorizaciones como la ambiental, y reglamentación para el transporte y la metodología de extracción, entre otros aspectos.
El yacimiento de uranio se ubica en el centro de la meseta chubutense y sus reservas se estiman en 30 millones de libras en un tiempo de explotación de diez años. El ministro de Energía, Juan José Aranguren, ya había anticipado en junio el interés de Nación en explotar uranio en la Provincia y finalmente la obra para una planta piloto que permitirá los primeros ensayos tiene monto asignado en el presupuesto nacional. Aunque de baja escala, basta para la culminación de la obra en dos años: $8 millones en 2017 y otros $2 millones en 2018 para concluirla.
El desarrollo total del proyecto de uranio en Chubut implicaría una inversión inicial cercana a los 170 millones de dólares, y hay que indicar que mientras en este caso puntual solo se contempla la situación de Cerro Solo existen en Chubut otros cateos uraníferos que podrían avanzar si el de la CNEA logra la licencia social. De hecho, la empresa provincial Petrominera tiene su propio proyecto en desarrollo en la zona de Laguna Salada, cercana a Paso de Indios, en sociedad con una empresa canadiense, aunque en este caso el interés extractivo estaría asociado en forma mayoritaria a la medicina nuclear.
«LO INCLUYERON A ULTIMO MOMENTO»
Mientras diputados y senadores de la provincia habían discutido en bloque por la inclusión en el Presupuesto Nacional de obras clave para Chubut, como el Camino de Circunvalación del tránsito pesado para Comodoro Rivadavia, en ningún caso trascendió en esa etapa de análisis que la planta piloto para la producción de uranio fuera parte del listado.
Según Santiago Igon (FpV), que había sido uno de los más críticos con el proyecto presupuestario, la planta «no estaba en el listado de obras hasta la semana pasada. Apareció publicada cuando se firmó el dictamen en mayoría». Sucedió el lunes, cuando se reunió la Comisión de Hacienda previamente a la sesión especial que comenzó el miércoles y que terminó en la madrugada del jueves, donde se sancionó el proyecto que ahora debe discutir el Senado.
Para el diputado, la obra «va en contraposición a lo que se viene planteando en la provincia», considerando que «si viene una prueba piloto, definitivamente hay una intención de empezar a incursionar en estos temas en Chubut. Ya lo habían anticipado (Sergio) Bergman, (ministro de Ambiente); (Mauricio) Macri y Aranguren, y entiendo que habrá voluntad en algunos actores políticos de la provincia».
Según planteó Igon, el valor asignado nivel presupuestario es «chico», aunque consideró que hay que estar atentos a que el presupuesto no sea reconducido y determine la inversión millonaria para avanzar en la explotación. Advirtió: «están poniendo el caballo delante del carro» ya que se están imponiendo el tema desde Nación, y antes debería plantearse cuál será el perfil o matriz productiva de Chubut.
«Nadie desconoce la importancia que tiene el uranio para la provincia, el país y el mundo, pero hay que discutir la matriz en la provincia primero», sostuvo. Y agregó que en el mismo presupuesto la obra más importante que recibirá Chubut, con una inversión de 600 millones de pesos, es el proyecto de riego en la meseta, aunque de avanzar con la minería se pierde la factibilidad de producción agrícola, que es en teoría para lo que se planifica la irrigación en la zona.
«Lo plantean como una planta de prueba cuando claramente pueden bajar un presupuesto monstruoso para avanzar más rápido. Es significativa la intención detrás de lo dicho con este tema, sobre todo porque apareció de la noche a la mañana», insistió.
Comentario del lector Pablo Lada en «El Patagónico»
Estimado director del diario El Patagónico: hay un ERROR grosero en vuestro artículo que deja entrever que la minería uranífera estaría de alguna manera permitida. El uranio NO tiene una clasificación especial como COMBUSTIBLE nuclear. Está declarado (al igual que el torio) como un mineral METALÍFERO NUCLEAR, por lo que se rige dentro de los minerales de primera y segunda categoría, en este caso, nucleares.
Para estos minerales CORRE LA MISMA PROHIBICIÓN QUE TIENE TODA LA MINERÍA METALÍFERA EN LA LEY CONOCIDA COMO 5.001. Es decir, la extracción, tanto de uranio como de torio, está PROHIBIDA en la modalidad a cielo abierto. Sigue vigente la ley 5.001 para ellos. Es importante también destacar que los yacimientos más grandes (cerro solo) tienen que hacerse a cielo abierto por las propias características de mineral diseminado, con lo cual la legislación no le permitirá hacerlo sin una modificación, a la que por supuesto los movimientos sociales nos opondremos férreamente. Lo que no quita que intenten hacer explotaciones por galería en algún sector, o peor aún, la muy peligrosa lixiviación in situ, por lo cual la planta de uranio que el presupuesto nacional declara (ya la habían intentado en el presupuesto del anterior gobierno kirchnerista) no está prohibida.
Lo que tenemos que discutir a rajatabla es que se respete la ley 24.804 que establece: “Todo nuevo emplazamiento de una instalación nuclear relevante (la planta de cerro solo lo sería) deberá contar con la licencia de construcción que autorice su localización, otorgada por la Autoridad Regulatoria Nuclear con la aprobación del estado provincial donde se proyecte instalar el mismo. (Ley nacional 24804, artículo 11).”, presionando al gobierno provincial para que no autorice su instalación.
La única diferencia de los minerales metalíferos nucleares con el resto es que, en el caso de los minerales nucleares, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) -o sea, el Estado- tiene facultades para realizar prospección, exploración y explotación de estos minerales metalíferos nucleares, cuando en el resto de los minerales está auto inhibido, tiene prohibido explotar minerales por el art. 9 del código de minería que expresamente le prohíbe al Estado realizar explotaciones, entregándoselas en concesión a los privados… Es solo por esta razón que la CNEA tiene yacimientos, como podría tener –y tiene- cualquier privado.
No es que el “Código Nacional Minero estableció que el yacimiento uranífero Cerro Solo es “propiedad” de la comisión nacional de energía atómica CNEA” como expresa vuestro artículo. Más bien, que al tener permitida la explotación de minerales nucleares se hizo de ese yacimiento porque probablemente en algún momento lo declaró ante la dirección de minas. También tiene el estado nacional la opción prioritaria en la compra de los productos nucleares hechos en la Argentina.
Lo que si hubieron intentos, y tal vez sea esto lo que lleve a la confusión, de crear una legislación nacional especial para declararlos combustible nuclear o minerales estratégicos, pero eso no ha sucedido.
Conclusión: la minería nuclear metalífera en la modalidad a cielo abierto ESTA PROHIBIDA, como así también el uso de cianuro en las explotaciones mineras. Por favor aclaren esto porque el artículo es muy confuso.
El Bolsón Blog