La alarma surgió tras encontrar restos de cables cortados; cuando los técnicos decidieron dar un vistazo para ver qué ocurría, descubrieron que se trataba de una invasiva presencia de los animales.
Los vuelos tenían que recorrer la zona de Río Grande, Río Gallegos y Comodoro Rivadavia. Según informó la institución en su página oficial, el avión DHC-6 Twin Oter estaba capacitado para transportar una capacidad máxima de 7 personas de ida y 10 a la vuelta.
Los vuelos, que dependen de la Fuerza Aérea Argentina y del Ministerio de Defensa de la Nación, son utilizados para unir centros de densidad poblacional con aquellos más alejados y aislados, de forma tal de facilitar la comunicación entre ambos.