En una audiencia de control de detención realizada en sala de oficina judicial, el Ministerio Público Fiscal a través de la fiscal general Carolina Marín expuso sobre un hecho ocurrido el 27 de julio cerca de las 22,35, cuando un menor de 17 años interceptó a un jóven y sin mediar otras circunstancias asestó varios puntazos.
Así, según lo certificado por los médicos, la víctima tenía tres heridas en los brazos, mientras que constaban también heridas en el abdomen y otra en el pecho, debido a las cuales debió ser intervenido quirúrgicamente y se encuentra reponiéndose en el hospital zonal. De acuerdo al relato, al momento de ser agredido, un vehículo que pasaba por el lugar conducido por una mujer paró y su ocupante comenzó a gritar, haciendo que el agresor se fugue y el agredido pueda llegar al domicilio de un familiar, ubicado en calle Simón de Alcazaba, cerca de donde sucedió el ataque.
Manifestó la fiscal que la calificación es tentativa de homicidio, de acuerdo a los artículos 79, 45 y 42 del código penal, y enfatizó en la probabilidad de autoría, a partir del testimonio de la propia víctima, quien indicó que ni siquiera fue abordado con fines de robo sino que directamente intentó matarlo. La policía observó, una vez puesta en conocimiento, al menor conduciéndose en una bicicleta y con sus manos ensangrentadas. Según la fiscalía existe peligro de fuga teniendo en cuenta la gravedad del hecho y la expectativa de pena, mas allá de las condiciones establecidas para quien tiene 17 años.
Tanto el defensor Lisandro Benítez, como el asesor de menores Pablo Rey, indicaron que no estaría confirmado lo sucedido ya que faltan realizar medidas, entre ellas un reconocimiento en rueda, mientras la fiscal informó que la víctima se encontraba de vacaciones ya que está radicado en España y deberá tomarse un anticipo jurisdiccional de prueba una vez que esté en condiciones.
De acuerdo a todo lo escuchado durante la audiencia, el Juez Marcelo Nieto Di Biase resolvió que se mantenga la detención del menor en el COSE, hasta tanto se pueda disponer de una tobillera electrónica, momento en el cuál se continuará con la medida en la modalidad de arresto domiciliario. Una vez que se realicen las medidas solicitadas se revisará la situación del menor involucrado.