Carlos Lorenzo percibe más de un millón de pesos por año de la Legislatura
Desesperado por sobrevivir en la selva de la política chubutense, el radical Carlos Lorenzo acata las órdenes de su jefe, el melancólico Mario Cimadevilla, quien se dedica a hacer campaña contando proyectos frustrados durante toda su carrera política:
Fui Consejero de la Magistratura de la Nación, el Poder Judicial es patriarcal y verticalista. En 2014 presenté un proyecto para erradicar la violencia laboral y de género. Nunca fue tratado.
Acá lo pueden leer: https://t.co/jGPlLa3FxE
— Mario Cimadevilla (@mariocimadevill) 13 de diciembre de 2018
Un Mario Cimadevilla oportunista y senil, que opera constantemente atentando contra la integración de la coalición Cambiemos en Chubut, procurando proteger los intereses propios y sus privilegios de clase.
Del mismo modo, el ex presidente de la cámara de empresarios, Carlos Lorenzo, cobra más de 1 millón de pesos por año como ñoqui en la legislatura provincial, razón por la cual atenta públicamente, al igual que su jefe político, contra el armado del frente electoral que le da sustento.
Por redes sociales, Lorenzo dijo que “se negociarán todos los cargos con las otras fuerzas con excepción de la línea sucesoria”, aludiendo claramente a que el acompañante de fórmula de Menna será radical y no del PRO como se viene discutiendo en las últimas semanas.
En el radicalismo de Chubut cobra fuerza la definicion que se negociará todos los cargos con las otras fuerzas con excepción de la línea sucesoria. Al igual que Macri.
— Carlos Lorenzo (@lcarlosalorenzo) 26 de diciembre de 2018
La reacción no tardó en llegar, y miembros del PRO utilizaron el mismo medio para recordarle, entre otras cosas que, en palabras del titular de Anses, Sebastián López, ni el PRO ni la UCR llegarían a ser gobierno solos:
La busqueda de consenso en @CambiemosChubut esta planteada, sabemos que ninguno de los dos espacios llegaría solo a ser gobierno. Tenemos el deber de hacer lo que nos pide nuestro electorado, por lo tanto, buscaremos ecuánimidad en el armado
PRO+UCR+CC =@cambiemos https://t.co/rQeLTQaQ5C— Sebastian Lopez (@SebasLopezOk) 26 de diciembre de 2018
Por su parte, el precandidato a intendente por el PRO en la ciudad de Rawson, Javier Detlefsen, le indicó que fue él, Carlos Lorenzo, candidato de la derrota cuando se presentó para gobernador en 2015:
Con todo respeto Carlos, a pocos días del cierre de alianza evidentemente hay personas que piensan en la personal, necesitamos vocación de ganar y la diferencia se ve claramente entre los resultados del 2015 vs 2017 en2015 perdimos por amplia diferencia usted encabezaba la lista
— Javier Detlefsen (@javieldetle) 26 de diciembre de 2018
Incluso la vicepresidenta del partido amarillo, Sonia Cavagnini, le bajó la caña de la moral, solicitándole dejar las mezquindades de lado:
Con el respeto que te tengo @carloslorenzo me parece que hay que terminar con estas mezquindades. Vimos la diferencia de ir juntos en el 2017 contra el 2015 que quedamos muy lejos y vos fuiste candidato a gobernador @CambiemosChubut
— Sonia Cavagnini (@SoniaCavagnini) 26 de diciembre de 2018
El acompañamiento de sus dichos resultó un fracaso, apenas un tímido “me gusta” de la concejal trelewense Florencia Rossi, que tal vez, oprimió por error el corazoncito de twitter al “chusmear” el tuit de su correligionario.
Con todo esto, acorralado y expuesto, Lorenzo expresó un confuso tweet indicando que lo dicho “no era su opinión personal”, tratando así de tomar distancia de su propia torpeza:
Así es Detlefsen, igual diferencia entre el Macri del 2015 y el del 2017. Además lo mío fue un comentario de la realidad y no significa que sea mi opinión.
— Carlos Lorenzo (@lcarlosalorenzo) 26 de diciembre de 2018
La torpeza de Lorenzo, pone en riesgo el acompañamiento del PRO a Gustavo Menna, que hoy representaba una coalición consolidada y con amplias oportunidades de ser gobierno en 2019.
A días del año nuevo y a semanas del cierre de alianzas, las redes sociales son un lugar propicio para este tipo de papelones, donde no son más que los propios protagonistas los que se exponen públicamente dando a luz a sus intereses personales por sobre los colectivos.