Ayer quedaron imputados en la causa de la emergencia climática los dueños de las empresas «Blanquería Matices» y «Thor S.R.L.». El fiscal Omar Rodríguez afirmó que los reproches en la acusación será más elevados porque «no se trata de personas carenciadas».
En la audiencia de apertura de investigación que se realizó en la Oficina Judicial de Rawson, la jueza Mirta Moreno imputó provisoriamente como partícipes primarios por administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública a los dueños de ambas compañías.
A la titular de Blanquería Matices le imputan cinco hechos, de los cuales uno es en grado de tentativa. La defraudación estimada por los fiscales asciende a $ 2.911.385, vinculados a la venta de colchones, frazadas, toallas, mantas térmicas, luces led y botas de aguas, entre otros elementos.
A los dos dueños de Thor S.R.L. (Casa Maza), la imputación es de características similares y por una presunta defraudación de $ 2.100.000. En este caso, los fiscales denunciaron el pago de retornos por $ 210.000, según consta en las planillas confeccionadas por Diego Luthers y contrastado por una extracción en el Banco del Chubut de una partida idéntica.
«Estamos hablando de un hecho muy grave en la situación y el marco que se dio. Hay que recordar que no son personas carenciadas, que tienen posibilidad de salir adelante, de tener ingresos legítimos. Y lo que muestra acá, o el móvil de este tipo de maniobras, es justamente la codicia. Entonces, siempre el reproche es mucho más elevado», dijo Rodríguez ante una consulta de EL CHUBUT.
El fiscal explicó que la maniobra se repite en todos los casos: «Arreglaban generalmente con Luthers que era el que tenía el contacto directo con los proveedores, le daban facturas y remitos sin documentación alguna, se armaban los expediente y una vez que cobraban, los proveedores retornaban esa plata a mano de los funcionarios».
CONFORMARON FACTURAS ANTES DE QUE LLUEVA
Uno de los casos emblemáticos en la causa de la emergencia climática en la ciudad de Comodoro Rivadavia fue la confección de una factura solicitando colchones un día antes de que comenzara la catástrofe en la provincia del Chubut.
«Hay una venta antes de empezar a llover. Se trata de un remito de entrega de los colchones que fue el 28 de marzo de 2017, y el 28 todavía no había empezado a llover en Comodoro, comenzó el 29», sin embargo, «la entrega de mercadería en el marco de la emergencia tenía fecha del 28», relató el fiscal en conferencia de prensa.