Al menos tres ladrones se llevaron una caja metálica con unos 50 mil pesos y unas computadoras del Correo de Dolavon, en un hecho que fue descubierto ayer, pero que ocurrió el fin de semana. Es el cuarto robo que ocurre en ese lugar situado en el centro de la localidad y a metros de la Comisaría; y los investigadores no descartan que los autores sean los mismos.
El jefe de la Comisaría habló del caso y consideró que allí no se ha invertido nada en seguridad frente a la sucesión de los robos que hubo. «No le han colocado alarma, tampoco rejas a las ventanas. Las puertas no tienen más que la seguridad de la llave común, es un predio que tiene libre acceso y no le han colocado luz al patio trasero, o sea que se puede observar una dejadez respecto de las autoridades del Correo», observó el subcomisario Fernández.
Se le consultó si no tenía cuidador el lugar. «No hay ningún sereno y la casa contigua está abandonada. No está ocupada por nadie. Está sin habitar hace bastante tiempo ya», dijo.
«¿Y en esta ocasión volvieron a ingresar por esa dependencia, como en los hechos anteriores?», se insistió. «Correcto, este fin de semana también; entraron por una ventana de la vivienda que está conectada al Correo por la parte interna», explicó.
Al consultársele si habían hecho mucho daño, Fernández indicó que «forzaron una puerta y para ingresar a la vivienda empujaron una ventana. En la división entre la casa y el Correo había un candado y lo rompieron, nada más».
Luego consignó, cuando se le preguntó si tenían idea de cuántos delincuentes habían entrado al Correo, que se levantaron tres rastros «de zapatillas diferentes» y también dijo que se observaron huellas de cubiertas de un auto; «muy borrosas debió al clima, a la lluvia de estos días», acotó.
Finalmente, el subcomisario Fernández, quien hace pocos meses que está al frente de la Comisaría de Dolavon, aseguró que hasta el momento no han recibido denuncias de faltantes de cartas o encomiendas, aunque detalló que el lugar en donde se encontraba la correspondencia «estaba revuelto».
El Chubut