Suelen repetir los que conocen de cerca al diputado de Convergencia Alfredo «Peludo» Di Filippo. “Este mata a su vieja por conseguir lo que desea”, suelen agregar estos allegados con total convicción y sin horrorizarse.
Los límites éticos y morales del “peludo” Di Filippo son imposibles de medir pero las frases de sus allegados parecen pintarlo de cuerpo entero.
Es de público conocimiento que Arcioni no tiene el mejor concepto: “Di Filippo es lo más nefasto que hay en la política de Chubut”, dijo alguna vez el gobernador, y si bien la relación entre ambos tuvo altibajos durante estos años, lo cierto es que la idea de fondo no cambió y hasta lo tildó de extorsionador.
Di Filippo está atravesando el ocaso de su deslucida carrera política y en uno de los últimos intentos de encontrar alguna señal en el gobierno provincial que le permita ocupar algún cargo en la próxima gestión desde donde continuar con sus negocios, volvió a mover la estantería mediática apuntando a sus cañones hacia quien le dio la posibilidad de ser diputado, Rossana Artero.
Hace algunos días, el diputado afirmó a los medios que “Artero fundió el municipio de Rawson”, cosa que no es real a pesar de que él hizo todo lo posible para que ocurriese: un mes antes de irse del municipio aprovecho un viaje de la intendenta para quedar al frente del ejecutivo y despilfarró todo lo que se había ahorrado en 4 años, pagando gastos a amigos y empresarios cercanos.
Una vez en legislatura, peludo hizo un acuerdo con el entonces gobernador Mario Das Naves para que ninguna dependencia provincial (Gobierno, Legislatura, Banco, Vialidad, etc) paguen los impuestos inmobiliarios y automotores, recursos vitales para la subsistencia económica del municipio. Durante 2016 y 2017, el municipio de mantuvo en pié subsistiendo como pudo. A cambio, el peludo levantó la mano en la legislatura cada vez que se lo solicitaron.
Misógino y acosador
Durante aquellos días, peludo gastó todo su arsenal contra Artero. Además del acuerdo con el gobernador, envió a sus secuaces a realizar denuncias mediáticas que nunca tuvieron asidero en la justicia y acosó a través de medios amigos y mensajes de WhatsApp a la intendenta. El objetivo era claro: hacerla renunciar.
Desde el entorno de Artero afirman que la mandataria municipal tiene muy presente todo lo que tuvo que afrontar y guarda con mucho cuidado los recortes y archivos de esa época. Nadie descarta que en algún momento se presente en la justicia con todo ese material para