En la segunda jornada del juicio oral y público de la causa Embrujo, seis testimonios describieron ayer los nexos, las compras de terrenos, las ventas y los planes del grupo liderado por Diego Correa. Las defensas pidieron la nulidad de las escuchas telefónicas, pero los jueces ratificaron que serán válidas para el juicio.
Ayer declararon el excomisario Juan Carlos Nuñez; el empleado que llevó la operatoria de la venta de terrenos en la cordillera, Nicolás Scandizzo; la extitular de la empresa Dual Core, Luciana Cavalaro; la testigo Claudia Zafaroni; el amigo y exsocio de Correa, Fabián Río; y el arquitecto que hizo la parrilla de la vivienda de Playa Unión, Diego Fernández.
En la audiencia de ayer hubo un extenso debate sobre la validez de las intervenciones telefónicas que serán utilizadas en el juicio como prueba. El abogado Omar López, que defiende a Juan Carlos «Tato» Ramón, fue el primero en poner reparos cuando el primer testigo, el excomisario Juan Carlos Nuñez, salió del guión y comenzó a brindar detalles de las intervenciones telefónicas.
En ese momento, López cortó el relato del excomisario y pidió al juez que se retire para plantear la nulidad del testimonio porque estaba haciendo alusión a temas que no estaban previstos en la grilla que entregaron los fiscales.
Los jueces Alejandro Soñis, Ricardo Rolón y Marcela Pérez no hicieron lugar a la solicitud de López y Núñez retomó su exposición, esta vez con la autorización a hablar sin restricciones, inclusive sobre las escuchas telefónicas.
A partir de ahí, se desató una fuerte discusión entre las defensas y los fiscales sobre la autenticidad y la cadena de custodia de las intervenciones telefónicas a Diego Correa, Natalia Mc Leod, Diego Luthers y Daniela Souza, entre otros imputados.
Las defensas alegaron que no se respetó la cadena de custodia y hasta alegaron que las escuchas «no son las que entregó el Ministerio Público Fiscal».
Los fiscales Omar Rodríguez y Alex Williams describieron cómo es el proceso y sostuvieron que los CD’s que contienen las escuchas telefónicas tienen códigos de seguridad únicos.
Frente a este dilema planteado, el Tribunal resolvió rechazar el pedido de nulidad de las intervenciones telefónicas, tomándolas como prueba en el juicio. «No hay posibilidad de que los CD’s sean adulterados», se señaló.
EL RELATO DE NUÑEZ
El hombre designado para la investigación por los fiscales esbozó un extenso relato sobre cómo empezaron a aunar y a entrelazar el accionar de cada uno de los integrantes del grupo.
«Entre el 21 de diciembre de 2017 y el 25 de diciembre de 2017, hicimos todas las presentaciones para tener a disposición las contrataciones entre Dual Core y Sepat con el Estado», graficó Nuñez. «En nuestra base de datos no teníamos que Mc Leod, Souza y Correa tenían un pasado de grandes empresarios de la construcción», sintetizó el excomisario, con respecto a las estructuras societarias de Dual Core y Sepat.
Además, consideró esenciales algunos de los allanamientos como el de la casa de los padres de Luthers, donde secuestraron la famosa planilla con pagos a funcionarios y exfuncionarios del Gobierno. «A través de la lista de Luthers dimos con la chacra que habían comprado en Trelew», remarcó Núñez, quien agregó que «del bolso de Luthers encontramos los proyectos en Pirámides, en el Parque Industrial de Trelew, donde dejaron un contenedor y el terreno en Las Golondrinas».
MASSONI, CLAVE EN EL APORTE DE DATOS
El ministro Coordinador de Gabinete, Federico Massoni, fue quien brindó información sobre la oficina de Playa Unión que pertenecía al Ministerio de Infraestructura y una segunda dirección que derivó en datos esenciales sobre la empresa Mezeta Consulting de Federico Gatica.
El excomisario Juan Carlos Núñez, recordó que Massoni fue un hombre que aportó datos certeros que permitieron generar avances en la investigación.
«Hay otro momento en la investigación que sucede una semana después de las detenciones, fue aproximadamente el 15 de marzo, cuando me llamó Massoni para decirme que había un lugar que no sabía a quién pertenecía, pero suponía que era la oficina donde trabajaba Sandro Figueroa», destacó Núñez.
En el allanamiento a esa oficina que pertenecía a Infraestructura, surgió documentación valiosa para la investigación y aparecieron chequeras en blanco con la firma de Mario Das Neves, que ya había fallecido en octubre de 2017.
SEIS LOTES POR $ 60.000 CADA UNO
Otro de los testigos fue Nicolás Scandizzo, ciudadano que reside en El Bolsón, Río Negro, y que trabajó en la escribanía que le vendió seis lotes en la cordillera a la empresa Dual Core. «Nuestros lotes estaban publicados para la venta, recibí muchos llamados, entre ellos alguna de las personas que está presente acá. Recibimos una oferta, se negoció el tema del precio, nosotros queríamos un poco más. Le pedí a la Escribanía que, si había un interesado, le tomen la reserva», argumentó Scandizzo.
«Los lotes los vendimos por 60.000 pesos a cada uno y la que firmó fue una mujer en representación de una empresa, que era Dual Core. El nombre de esa mujer es Daniela Souza», concluyó Scandizzo.