El ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, afirmó hoy que el desembolso de US$ 5.400 millones comprometido por el Fondo Monetario Internacional (FMI) se concretará este año, y admitió, además, que las actuales tasas, que rondan el 80%, son de «pánico».
«Hay una relación fluida entre Argentina y el FMI, vamos a volver a ir en dos semanas, es cierto que hay un desembolso pendiente, pero eso no quiere decir que no lo decidan realizar en el futuro. Ese desembolso va a concretarse este año», indicó Lacunza durante su presentación en un encuentro organizado por el Grupo Clarín.
De hecho, en la reciente visita a los Estados Unidos, se percibió «una alta expectativa por Argentina una vez resuelta la contienda electoral. En cuanto a una eventual renegociación de la deuda de mediano y largo plazo, reconozco que hay incertidumbre y se quiere cobrar todo cash, algo que no podría soportar ningún país del mundo».
De todas maneras, el ministro destacó el enfoque en común que comparten Cambiemos y el Frente de Todos en cuanto a la necesidad de realizar una «propuesta de negociación amigable, que haga más hincapié en la extensión de plazos».
«Argentina ha cumplido con todas las metas y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) va a completar los desembolsos pendientes para este año», añadió el ministro Lacunza.
Respecto al proyecto de ley que prevé las condiciones de negociación con los tenedores de deuda, reconoció que «es difícil la discusión parlamentaria en el medio de una campaña electoral, pero está en sintonía con hacer una propuesta voluntaria amistosa y no hostil, con cláusula de acción colectiva que busca evitar la aparición de holdouts».
El ministro, tras admitir que el actual nivel del dólar es competitivo, subrayó que las medidas de extensión de plazos para el pago de algunos instrumentos financieros en moneda local y el control de cambios se implementaron «en forma transitoria, para evitar daños mayores durante la transición. El tipo de cambio está 90% más alto que en 2016, aunque en ese escenario hay presión irracional que quedará atrás una vez superado el tema electoral».
Respecto al nivel de las tasas de interés y la posibilidad de impulsar una fuerte baja en el corto plazo, Lacunza calificó a los actuales niveles como de «pánico», que solo tienen el sentido de «estimular el ahorro en pesos para evitar una dolarización. En la medida que sigamos con estabilidad cambiaria, como en estas últimas semanas, la tasa bajará pero no se derrumbará», así lo reseña Télam.