La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, rechazó ayer las críticas de Sergio Maldonado respecto a la muerte de su hermano Santiago y consideró que «ha hecho de esto una bandera, quiere que la realidad encaje con su versión».
«Todo esto ha sido muy difícil, porque antes de que se supiese nada, cuando el Gobierno le ofreció ayuda a Sergio Maldonado, él ya tenía una decisión tomada de lo que había pasado con su hermano», sostuvo la funcionaria nacional, así lo detallo El Chubut.
La integrante del Gabinete afirmó que por esa razón «nunca pudo haber un diálogo racional» con la familia del joven artesano que, tras participar de una protesta desalojada por la Gendarmería el 1 de agosto de 2017 en Cushamen, estuvo desaparecido durante 77 días hasta que su cuerpo fue hallado en el río Chubut a escasos metros de donde había sido visto por última vez.
«Eramos los más interesados en saber qué había pasado. Ha hecho de esto una bandera, que quiere que la realidad encaje con su versión y esto no es así. No va a encajar con la realidad a menos que alguien quiera manipularla», remarcó la dirigente oficialista respecto a la visión de la familia Maldonado acerca de que la muerte del joven artesano se produjo luego de una desaparición forzada ejecutada por los uniformados. Y añadió: «La Argentina necesita legalidad, Estado de derecho. Los miembros de las fuerzas de seguridad también tienen derechos humanos. No pueden ser acusados per se, sólo por ser miembros de una fuerza de seguridad. No se puede tener una mirada per se siempre culpando a las fuerzas de seguridad».
En ese sentido, Patricia Bullrich aseguró que el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) «partieron de un preconcepto» al considerar que se trataba de un caso de desaparición forzada y reclamó que se analicen los hechos «sin prejuicio, sin estigmatizaciones para que en todos los casos se pueda trabajar con la verdad».
Posible abandono de persona
A la vez, la ministra de Seguridad también se expresó respecto a la decisión de la Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia de ordenar reabrir la investigación por la muerte del joven artesano de 28 años para determinar si hubo abandono de persona cuando el tatuador se introdujo en el río durante el operativo de desalojo de la protesta mapuche concretado por la Gendarmería Nacional.
«Lo que sucedió fue muy claro: hubo una protesta que cortaba la única ruta, Gendarmería despejó el día anterior, volvieron a cortar la ruta y Gendarmería volvió a actuar e intentó detener en flagrancia, pero no tuvo ningún contacto físico con ninguno de los miembros del grupo. Si lo hubieran detenido o visto, lo hubieran ayudado», manifestó.
Y añadió: «Abandono de persona es si lo hubieran visto y no lo ayudaron. Eso está más dirigido a aquellos compañeros de Maldonado que no hicieron nada».