El candidato a Presidente por Consenso Federal criticó al Gobierno por el modelo económico sostenido durante estos cuatro años.
Quien desde Consenso Federal busca presentarse como una alternativa superadora sobre la grieta que atraviesa a la Argentina, Roberto Lavagna, se pronunció en las últimas horas sobre la coyuntura económica local y desestimó comparaciones con el caso del 2001.
En diálogo con América, el ex ministro de Economía y Producción partió por destacar: “La situación es mucho menos grave que el 2001. Comparado, esto es menos grave, a pesar de que para la vida efectivamente es una cosa muy dura”.
No obstante, sí entiende que “lo político, es mucho peor que el 2001. Duhalde y Alfonsín dieron diálogo argentino con todos los sectores, eso ayudó muchísimo a lograr los acuerdos necesarios”.
Quien recibiera 2.081.315 de voluntades (8,44% votos afirmativos) en las últimas elecciones primarias, fue consultado sobre la posibilidad de que ocurra un eventual “corralito”: “Esperemos que no. Nunca se puede excluir nada en la Argentina. El cambio de Gobierno debería ayudar. Ahora, lo que creo imprescindible es crear un equipo de coalición”, precisó.
De igual manera, señaló que “Macri ya perdió, esto está terminado”, al tiempo que en referencia al tweet del Presidente donde se sostiene que “la elección aún no sucedió”, Lavagna entiende que “es la continuidad de una permanente negación. El Gobierno desde el vamos cometió errores, muchas veces se les intentó explicar cómo iban a terminar y sin embargo ellos sabían todo”.
A su vez comentó que habló con el líder de Cambiemos sobre la ley de reperfilamiento de la deuda y reveló que el mandatario no estaba al tanto del estado en el que se encontraba el proyecto.”Su queja era: ‘no me ayudan a que avance’, pero el proyecto no estaba ni siquiera circulando”.
En último término, consideró que “la herencia que dejó Cristina Kirchner fue complicada y Macri la complicó mucho más. Los hechos demuestran el empeoramiento que ha habido”, así lo informó Brujula24.
“La relación íntima con el sector financiero es fenomenal, equivalente a la época Menem-Cavallo, por eso la deuda que nos dejan. Los seis primeros meses del año se gastó en pagos de intereses tres veces lo que se dedicó para obra pública. Nadie le pregunta al Gobierno cómo se financia el aumento de las tasas de interés”, cerró Lavagna.