El Fondo Monetario Internacional (FMI) rechazó que pueda haber una quita en la deuda de 44.000 millones de dólares que mantiene Argentina con la entidad multilateral puesto que no se violaron los estatutos del acuerdo, afirmó el portavoz de la entidad, Gerry Rice.
Rice respondió así al ser consultado por unas afirmaciones de la vicepresidenta, Cristina Fernández, quien aseguró el pasado fin de semana que «no se puede hacer una quita porque el estatuto lo prohíbe, pero también prohíbe prestar para fugar capitales».
El portavoz del Fondo, que no quiso ahondar en la controversia, sí aseguró «que no hubo violación de las reglas del FMI».
«Compartimos los objetivos del Gobierno para estabilizar la economía y proteger a los más débiles con un crecimiento inclusivo», afirmó.
Una misión de la entidad multilateral llegó el 12 de febrero a Buenos Aires para revisar las cuentas públicas y dialogar con funcionarios, empresarios y analistas ante la intención del Gobierno de renegociar el préstamo.
En base a ese acuerdo stand-by (de contingencia) firmado con la administración anterior, el FMI prestó a Argentina unos 44.000 millones de dólares de los 56.300 millones previstos en un comienzo.
En contrapartida, el organismo multilateral exigió un ajuste en las partidas presupuestarias para llegar a un equilibrio en el déficit, lo que conllevaba un programa estricto en lo fiscal y en lo monetario.
El Gobierno actual sancionó el pasado 12 de febrero en el Congreso un proyecto sobre la Restauración de Sostenibilidad de la Deuda Externa que permite renegociar los vencimientos de los títulos públicos emitidos bajo legislación extranjera.