Bill Gates tomó el escenario de la popular conferencia TED en abril de 2015 para explicar lo que él creía que sería la próxima gran catástrofe global. Su razonamiento «no serán bombas nucleares, no serán guerras, no serán misiles: será un virus altamente infeccioso que podría matar a millones de personas».
El contexto cronológico de la charla tiene importancia: lo hizo un año después de que se evitara un brote global del ebola. En su opinión, al menos en 2015 no estábamos listos para la siguiente gran epidemia.
La charla cumple cinco años y muchas de las predicciones hechas por el fundador de Microsoft se están cumpliendo, la propagación del coronavirus no parece detenerse y en gran parte, debido al desconocimiento del comportamiento de virus nuevos, las medidas para detenerlo aún no son claras.