Bruno Pogliano finalmente dio doble hisopado negativo y está curado. Estuvo internado un mes en el hospital y aislado en su casa hasta ayer martes.
El intendente de El Bolsón, Bruno Pogliano, estuvo 38 días con el diagnóstico positivo de coronavirus. Luego de que le realizaran cinco hisopados, durante la noche del martes le dieron el alta.
“Cada resultado es un golpe para mí y para mi familia. No veo la hora de terminar con esta pesadilla y poder abrazarlos”, había manifestado el martes a la mañana, antes de conocer que recibiría el alta médica.
El 22 de marzo pasado, a muy pocos días de regresar de un viaje por Europa, Pogliano se encontró con que tenía 37,8 grados de fiebre. Su instinto lo llevó a consultar de inmediato a la infectóloga del hospital de El Bolsón, Romina Hansen. Como arrastraba un cuadro de asma leve y había regresado de una zona de riesgo, quedó internado preventivamente hasta recibir los análisis del Instituto Malbran.
Cuando le confirmaron el diagnóstico positivo, admitió que sintió miedo. “Nunca sospeché porque no veía mucha sintomatología vinculada con el coronavirus. Si ese domingo hubiese tomado un paracetamol y me quedaba en mi casa, ni me hubiese dado cuenta. Gracias a la infectóloga que me aconsejó, pude prevenir mayores contagios. No hubo ningún contagio posterior”, expresó.
Pese a haber compartido el viaje con su familia, ni su esposa ni su hija de 10 años ni su hijo de 19 ni su suegra se contagiaron el virus. “Yo no volví a tener fiebre. Fue leve pero eso hace que la incertidumbre y el estar internado un mes en el hospital sin ver a tu familia y sin entender qué pasa, sea aun más angustiante”, reconoció.
Durante ese mes que permaneció internado, Pogliano se dedicó a leer y a meditar. A los 25 días, le permitieron ingresar un televisor. A través de internet, se mantuvo en contacto con el presidente del Concejo Municipal, Fabián Rudolph, y monitoreó las medidas preventivas. “Trataba de relajar pero es difícil en este estado de incertidumbre. El contacto fue fluido pero tampoco soy yo quien decide. Hay un poder delegado pese a la consulta constante”, aseguró.
“Gracias a Dios –advirtió- no tuve síntomas pero eso hace más angustiante el paso del tiempo. Más allá del acompañamiento de los médicos y el personal, el aislamiento asintomático en el hospital es muy complejo desde lo psicológico”, dijo a Diario de Río Negro.
El Bolsón registra hasta el momento dos casos de coronavirus: un nene de 4 años -que ya obtuvo el alta médica- y el del intendente, que ayer siguió los mismo pasos.
“Estamos a la espera del cultivo que haga el Malbrán para medir el virus activo y muerto -había dicho temprano-. Para ver si contagio o ya no. Hay varios casos como el mío que siguen dando positivo luego de 40 días. Se vieron muchos en Europa, como el del futbolista Dybala”, enfatizó Pogliano.
Con el cambio del protocolo a nivel nacional, pudo concretar el aislamiento obligatorio en su casa aunque sin contacto con su familia. La disposición establece que después de 21 días, un paciente con coronavirus no requiere estar internado.
“Al menos, tenemos contacto visual y pude estar el día del cumpleaños de mi hija. Estamos en una misma casa separados por una puerta. Nos comunicamos con barbijos a dos metros de distancia”, describió.
Pogliano lamentó la “poca empatía de la sociedad”. “Nadie elige enfermarse. El miedo saca lo peor de cada uno. Y muchos, sin escrúpulos, han querido aprovechar políticamente este momento que me tocó transitar. Quedó demostrado que todo el accionar fue correcto. No hubo más contagios”.