El costo de la construcción en dólares está en un mínimo histórico, en torno a US$600 por metro cuadrado, por lo que la inversión en ladrillos podría volver a ser una oportunidad y permitir a la actividad cobrar un importante dinamismo luego de que se liberen las restricciones por la cuarentena, coincidieron analistas del sector.
El costo de la construcción en dólares está en un mínimo histórico en torno a 600 dólares por metro cuadrado, por lo que la inversión en ladrillos podría volver a ser una oportunidad y permitir a la actividad cobrar un importante dinamismo luego de que se liberen las restricciones por la cuarentena, coincidieron analistas del sector.
En el seminario virtual «Nuevos Desarrollos Inmobiliarios post Covid» organizado por Reporte Inmobiliario, diversos referentes del sector señalaron también la necesidad de incentivos fiscales luego de la pandemia para acompañar la reactivación de la construcción.
«Tenemos la chance de potenciar la inversión en ladrillos en Argentina; hay una oportunidad contracíclica de hacer una obra que va a estar a muy bajo costo y eso después se convierte en un activo dolarizado», dijo el presidente de la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos (CEDU), Damián Tabakman.
«Vamos a tener costo bajo en dólares por 12 ó 18 meses, no se va a licuar a corto plazo; tenemos un horizonte suficientemente largo como para empezar obras ahora» y aseguró que «el sector tiene una solvencia intrínseca que le permite hacer frente al momento y también aprovechar el costo de producción tan bajo», sostuvo el directivo.
Vamos a tener costo bajo en dólares por 12 ó 18 meses, no se va a licuar a corto plazo; tenemos un horizonte suficientemente largo como para empezar obras ahora”
DAMIÁN TABAKMAN
En cuanto a los incentivos fiscales, Tabakman dijo que «vamos a trabajar para que los Cedines -que son un medio de pago e instrumento financiero que se aplica en la realización de inversiones en el mercado inmobiliario- estén, que nos bajen los impuestos y que vuelvan las obras».
Por su parte, el vicepresidente de la Asociación de Empresarios de la Vivienda (AEV), Gustavo Llambías, señaló que «estamos trabajando desde las cámaras para pedirle al Gobierno los incentivos que hacen falta; los inversores siguen pensando que ante la incertidumbre general, los inmuebles siguen siendo un refugio de valor».
«Estamos pidiendo algunas medidas puntuales de asistencia, como créditos y exenciones impositivas, para sostener el esfuerzo de quienes queramos seguir produciendo; estamos en buenas conversaciones», aseguró.
En tanto, el presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, Iván Szczech, dijo que «tenemos excelente ida y vuelta con el Gobierno nacional y estamos trabajando para hacer una propuesta muy concreta de incentivos al sector para la post pandemia».
Señaló la necesidad de «créditos que den capital de trabajo con un plazo de gracia importante; eso tiene que ser dinámico y rápido; hacen falta herramientas que motoricen inversiones como hay en Uruguay, Chile y Bolivia» y «también necesitamos que de alguna manera tengamos crédito hipotecario».
A su turno, el CEO de la constructora Criba, Santiago Tarasido, afirmó que «no recuerdo otro momento con valores de construcción en estos niveles; los que han sabido aprovechar han hecho grandes negocios, hay una gran oportunidad, necesitamos ponernos en marcha».
«No creo que tengamos otra oportunidad de construir tan barato como hoy, hay que ver cómo aprovechamos este momento de un costo muy bajo medido en dólares», observó y afirmó que en muchos casos se realiza acopio de materiales «para asegurar precios».
Dijo que tras la cuarentena «la prioridad inicial es la continuidad de las obras, que se retome la actividad, y a mediano plazo es necesario que haya incentivos, políticas públicas para que el sector reaccione y vuelva a haber trabajo y obras».
«La obra privada, según un estudio que hicimos con CEDU y AEV, generó en los últimos años alrededor de 5 millones de metros cuadrados de obras en Argentina. A razón de 500 dólares el metro cuadrado son 2500 millones de dólares por año, esto es lo que el sector le inyecta a la economía e invierte genuinamente», detalló Tarasido.
El arquitecto Hernán Gimenez señaló que la construcción de una casa de 160 metros cuadrados en un barrio cerrado de zona sur hoy ronda los 130 mil dólares con terreno incluido.
«Hay una oportunidad única porque el metro cuadrado de construcción con materiales de categoría media-alta está en menos de 600 dólares y registra una baja de 41% respecto de junio de 2019», aseguró.
En este contexto, el gerente general de la empresa de desarrollo de proyectos de viviendas Eidico, Mateo Salinas, dijo que el sector «rápidamente se va a poder recuperar, el Covid nos robó tres meses de trabajo pero nos trajo una oportunidad con esta diferencia del dólar para los que tengan dólares en mano o puedan construir pronto».