Algunos de los empleados contratados por la ex Ministra de Familia de Chubut, Cecilia Torres Otarola, nunca fueron a trabajar.
Tras la imputación de la ex Diputada Provincial y Ministra de Familia de Chubut, Cecilia Torres Otarola, por «fraude a la administración pública”, continúan las investigaciones sobre los hechos de corrupción realizados durante su tiempo de gestión.
En el marco de la causa «Ñoquis calientes», nombre que se le puso a este hecho considerando que Otarola contrataba personal para que luego le dejaran parte del sueldo, el Gobierno decidió dejar sin efecto dichas designaciones teniendo en cuenta que algunos de los empleados nunca fueron a trabajar.