Varias islas en el Caribe norte, desde Puerto Rico hasta La Española y Cuba, se preparaba el viernes para los fuertes vientos y lluvias de Laura, la más reciente tormenta tropical que atraviesa la región en una temporada de huracanes nutrida.
En Puerto Rico, donde se esperaba que los primeros embates empezaran a sentirse este mismo viernes por la noche, las autoridades de manejo de emergencias estaban preparando 324 refugios y advirtieron a la población de la llegada inminente de la tormenta. El viernes ya tarde, la gobernadora Wanda Vázquez dijo que había firmado un estado de emergencia cuando la tormenta tropical Laura se acercó a la isla.
“Mi mensaje para todos los puertorriqueños es mantener la calma”, dijo Vázquez. “Lo más importante es que las personas que viven en zonas de inundación o cerca de los ríos, saben que deben buscar un lugar seguro para pasar la noche”.
La tormenta es la más reciente en golpear una isla que, en los últimos tres años ha soportado dos fuertes huracanes, una mortal pandemia grandes y varios terremotos de cierta consideración.
Se espera que Puerto Rico sienta el pico de la fuerza de la tormenta el sábado por la mañana. Se espera que el sistema traiga deje caer entre 3 y 6 pulgadas de lluvia a la isla, aunque algunas áreas podrían recibir hasta 8 pulgadas.